Avalan que el Congreso pueda legislar sobre desaparición forzada

Agencia Reforma

Ciudad de México

La tragedia aparejada a la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa forzó una reforma al artículo 73 constitucional para otorgar facultades al Congreso para emitir una ley en materia de desaparición forzada, tortura, tratos inhumanos, penas crueles o degradantes.
En presencia de organizaciones de derechos humanos y de familiares de desaparecidos, el Senado de la República aprobó por unanimidad, con 104 votos, el nuevo ordenamiento que, homologado en la República, establecerá pautas a seguir en la prevención, investigación y sanción a los responsables de esos delitos.
“Es de vital importancia que se sustente la competencia del Poder Legislativo federal para dotar de un ordenamiento que homologue la descripción de la conducta acreedora de pena y las sanciones disponibles, así como las medidas de prevención, investigación, enjuiciamiento y sanción de este delito”, consigna el dictamen.
El perredista Armando Ríos Piter deploró la existencia de al menos 25 mil casos de desaparición forzada y el panista Roberto Gil dijo que seis de cada 291 averiguaciones previas terminan en sentencia en esa materia.
En la Cámara de Diputados, el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez, llamó al Congreso a no dilatar la aprobación de la reforma.

Frenan los diputados la
reforma del DF

La reforma política para el Distrito Federal, aprobada el martes en el Senado, fue frenada en la Cámara de Diputados por falta de acuerdo entre partidos.
Los diputados no acordaron si la iniciativa será discutida en un periodo extraordinario de sesiones o hasta el periodo ordinario que inicia en septiembre y con la nueva Legislatura.
La premura por aprobarla (debería resolverse en menos de 48 horas) y la propuesta de crear una inmensa burocracia con concejales y alcaldes en las nuevas demarcaciones fueron las principales objeciones.
Por ser una reforma constitucional, la minuta enviada por la Cámara alta necesitaba el apoyo de dos terceras partes de los 500 diputados, es decir 333; las bancadas del PAN, Panal, MC, Morena, y un sector del PRD, dijeron que no la avalarían. Los votos del PRI, PVEM y el resto de perredistas no alcanzaban para su aprobación con mayoría calificada.
La minuta del Senado promovía dar autonomía al DF y transformar las delegaciones en demarcaciones gobernados por alcaldías, con hasta 15 concejales electos por planilla, lo que incrementaría la burocracia en las demarcaciones al menos hasta con 300 funcionarios más.