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Era distribuidor de drogas el ganadero que llevaba la Policía Comunitaria atacada el jueves, afirma la Casa de Cochoapa

*El coordinador, Rolando Romero, informa que esa fracción de la CRAC está investigando el número de huérfanos y viudas que quedaron tras la balacera con policías del gobierno del estado en la que murieron seis policías comunitarios de la Casa de Justicia de Juchitán

Lourdes Chávez

Chilpancingo

El coordinador de la Casa de Justicia de Cochoapa, municipio de Ometepec, perteneciente a la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC), Rolando Romero, consideró inhumano el ataque de policías estatales contra policías comunitarios de la Casa de Justicia de Juchitán, que se suscitó el jueves pasado en San Juan de los Llanos.
En consulta telefónica, aseguró que ese día, cuando, poco después fue detenido el líder de la CRAC, Eliseo Villar Castillo, los comunitarios llevaban detenido a un distribuidor de droga en Cuajinicuilapa.
Confirmó que el detenido es el ganadero Noé Marroquín, como se informó en los boletines del gobierno del estado, sobre el presunto rescate de una persona secuestrada, para explicar la agresión a balazos con el saldo de ocho muertos: dos policías estatales y seis comunitarios.
Sin embargo, afirmó que la Policía Comunitaria tiene información confiable de que también es el distribuidor de droga para el narcomenudeo, en aquel municipio.
No obstante, añadió que la Casa de Justicia de Cochoapa está haciendo su propia investigación de los hechos antes de a dialogar con las autoridades estatales y presentar el número de huérfanos y víctimas que dejó la balacera en San Juan de los Llanos, municipio de Igualapa, comunidad localizada en la entrada de Ometepec.
Aclaró que debido a las conflictos con la Casa de Justicia de San Luis Acatlán, los coordinadores de Cochoapa estaban distanciados hace varios meses de Villar Castillo, pero nunca lo desconocieron como Policía Comunitaria de la CRAC, que hace más de un año opera de manera fraccionada en Costa Chica.
Rolando Romero precisó que hasta ayer no había dialogo con las autoridades estatales que desconocieron a Villar y Adelaida Hernández, como representantes de la Policía Comunitaria, y llamaron delincuentes a los comunitarios asesinados, para evitar otro evento de violencia.
Añadió que tampoco se instalaron retenes policiacos ni militares en la zona, que envían las autoridades estatales o federales cuando los comunitarios cometen “un error”. Detalló que “todo está como si nada hubiera pasado”, sin militarización.
Se dijo extrañado por el enfrentamiento, porque los comunitarios han coordinado acciones de seguridad con los estatales, en caso de abigeato y otros delitos, “no sé porqué esos elementos tomaron esas medidas, esto no debió de pasar, los comunitarios son conocidos”.
Lamentó que la Fiscalía General del Estado “está cargando la mano a la Policía Comunitaria” , pues si un policía comunitario respondió a la balacera y alcanzó a matar a dos policías estatales fue porque ya estaba la balacera, los demás quedaron en la camioneta sin defensa, es inhumano lo que pasó”. El gobierno del estado declaró lo contrario, que los estatales respondieron a la agresión.
Insistió en que este evento se tiene que aclarar con el fiscal del estado, “reconozco que el gobierno va a defender a su gente, porque para ellos nosotros no somos autoridades, e ignoran a los pueblos”.
De los fallecidos, confirmó que los seis son comunitarios originarios de Punta Maldonado y Tejas Crudas, municipio de Cuajinicuilapa, de la cabecera municipal de Omepetec, de la comunidad de El Aguacate municipio de Juchitán, y de Barra de Tecoanapa, municipio de Marquelia. “Sus familias, huérfanos y viudas, se quedaron sin sostén; hay muchos menores de edad”.

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