No fue omiso en Chilapa, se defiende el gobernador

*Va a dar sus condolencias a la familia del candidato priista  asesinado, Ulises Fabián Quiroz

Luis Daniel Nava

Chilapa

A cinco días del asesinato del candidato del PRI a la alcaldía de Chilapa, Ulises Fabián Quiroz, el gobernador Rogelio Ortega Martínez visitó esta ciudad para reunirse con la familia de éste, y además, presenció la entrega del Ayuntamiento, tomado por la CETEG desde octubre del año pasado.
Ahí, declaró a los reporteros que no fue omiso ante la situación de inseguridad de esta región.
A mediodía arribó en helicóptero y en su estancia lo acompañó un convoy de camionetas de seguridad blindadas, con guardias apostados en el perímetro en el que se movió, así como patrullas artilladas de la Policía Estatal y del Ejército.
En el restaurant Casa Pilla, ubicado en pleno centro de la ciudad, el gobernador se reunió y almorzó con el alcalde priista Francisco Javier García González, quien apenas el domingo en el sepelio de Ulises Fabián Quiroz declaró que Ortega es “un parapeto de gobernador” y que “no tiene los pantalones para enfrentar las necesidades que hoy tiene el estado”.
También acudió al encuentro el delegado de la Secretaría de Educación Guerrero en la Montaña baja, Félix de Jesús Jiménez.
Al salir de la reunión, junto al dirigente seccional de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación Guerrero (CETEG), Jorge Basilio Urbano, se trasladaron al edificio del Ayuntamiento, que entregó el magisterio.
Consultado en los portales, donde se plasmaron y ayer ya estaban quitadas las pintas donde se acusaba al candidato del PRD a la alcaldía, Miguel Cantorán, de ser el responsable del homicidio del priista Ulises Fabián, el gobernador dijo que acudió a este municipio obligado por los recientes hechos de violencia por la confrontación de dos grupos delincuenciales que operan en la región.
Además, dijo, su visita fue “para dar un mensaje de solidaridad, convocar a la armonía y a la reconstrucción del tejido social y para que el proceso electoral se realice en las mejores condiciones”.
Según Ortega Martínez, no fue omiso ante la situación de inseguridad de esta región y sostuvo que hay coordinación con la federación “y con las instituciones que nos ayudan a dar seguridad para poder dar un blindaje en toda la región”.
“Para Chilapa tenemos que implementar de inmediato un operativo especial. El problema de la conflictividad entre grupos delincuenciales confrontados tiene esas secuelas desagradables, pero habrá de implementarse un operativo especial los próximos días que le dé seguridad a la gente”.
Detalló que el operativo tendrá la participación de elementos de seguridad del estado y que pedirá refuerzos de la Marina y del Ejército.
Sobre el señalamiento que le hizo el edil de Chilapa, de que es un “parapeto”, el gobernador respondió que no se iba a meter a esas “inquisiciones”.
Se le dijo que siempre que hay brotes de violencia se anuncian reforzamientos que no han servido, a lo que respondió: “Imagínate de qué magnitud es el problema, tenemos que seguir reforzando, es perfectamente claro, reforzar, y si aún no es suficiente reforzar, será hasta que logremos eliminar un fenómeno que tiene profundas raíces, que penetró el tejido social”.
“Cuando venimos nosotros en la confrontación que tienen Ardillos y Rojos, 60 hombres armados enfrentados entre sí, y en unos cuantos minutos se difumina. Qué quiere decir: que se meten a las casas”, dijo.
“La sociedad está penetrada por la delincuencia organizada, seguramente por problemas de desempleo, por problemas de pobreza, por problemas estructurales que hay que atacarlos con programas sociales y con educación, empleo y seguridad”.
-¿Hay condiciones de seguridad para realizar la elección? -se le preguntó.
-Por supuesto, por supuesto. Son 81 municipios y estamos hablando de Chilapa, que es uno, y San Miguel Totolapan donde se presentó otro incidente.
Dijo que los avances de las investigaciones en torno al homicidio del priista Ulises Fabián Quiroz son asunto de la Fiscalía General del estado, que sostuvo es “autónoma”.
Luego, a la una y media de la tarde, con un aparatoso recorrido por las calles céntricas de la ciudad, el gobernador y el alcalde se trasladaron a la casa de la familia del extinto candidato Ulises Fabián Quiroz para que el mandatario estatal les diera sus condolencias. Ahí permaneció unos 15 minutos. Después se retiró.