Se van de Chilapa los civiles armados por acuerdo con la Policía Estatal; regresarán si no detienen a Los Rojos, advierten

*Desarman soldados y policías a los presuntos comunitarios, les decomisan 19 vehículos, 30 armas largas y cortas, municiones y carteras que les devuelven tras pactar su retiro

Redacción

Chilapa

Los cientos de civiles armados que sitiaron Chilapa desde el sábado pasado se retiraron de la ciudad, pero advirtieron que van a regresar en una semana si el Ejército y las policías no capturan a los líderes de la banda delincuencial Los Rojos.
“Es un acuerdo que ellos están imponiendo, por mí que no vengan pues sirve que no se altera el orden aquí en Chilapa”, dijo un mando militar.
Tras cinco días de su incursión y de tener el control de la cabecera municipal, ayer alrededor de la 1:30 de la tarde los civiles armados acompañados de autoridades comunitarias acordaron su retirada con mandos de la Policía Estatal y ante la presencia del Ejército y la Gendarmería.
El repliegue se dio después de que vecinos, entre ellos regidores, candidatos a síndicos del PRI y el ex alcalde Sergio Dolores se manifestaron en tres ocasiones en contra de la incursión armada y por la presentación de al menos 17 jóvenes que habrían sido detenidos por los civiles armados y están desaparecidos.
Además de la irrupción este miércoles de un comando fuertemente armado, presuntamente del grupo delictivo Los Rojos.
Alrededor de las 10 de la mañana de ayer en la salida a la comunidad de Acatlán, cerca del salón California, comenzó un ríspido diálogo que orilló al desarme de decenas de los presuntos guardias comunitarios, a quienes les decomisaron 19 vehículos y 30 armas largas y cortas, municiones y carteras.
Luego de más de 3 horas de negociación, el encargado de la Secretaría de Seguridad Pública municipal, el oficial de la Policía Estatal Juan Suástegui Epifanio y mandos castrenses regresaron las llaves de los automóviles, armas y demás pertenencias a los civiles, quienes denunciaron que a sus carteras les habían sustraído el dinero.
La irrupción de unos 400 hombres y mujeres con rifles, escopetas, machetes, palos y armas cortas de al menos 15 comunidades del sur del municipio, que instalaron retenes, catearon casas y negocios y patrullaron la ciudad en busca de líderes de la delincuencia y para exigir seguridad, provocó la renuncia del secretario de Seguridad Pública del municipio, que el alcalde priista Francisco Javier García González huyera del municipio y la suspensión de actos públicos de campañas electorales.
El teniente coronel Ulises Flores reveló el ultimátum que las autoridades comunitarias les pusieron para retirarse: “Manifiestan que si en esta semana no se logra la detención de esta persona (el líder de Los Rojos, Zenén Nava, El Chaparro) pues van a regresar nuevamente a la cabecera, ahorita ya se van a retirar”.
“Una semana es nada más un plazo que ellos están poniendo para que nosotros, digamos, hagamos nuestro trabajo que ya hemos venido haciendo, hemos estado trabajando con el fin de poder localizar a esta persona y tratar de sacar esta problemática”, expuso.
Sin embargo dijo que “de antemano no estamos nosotros para detener a nadie, nosotros únicamente actuamos en flagrancia, si llegamos a encontrar a esta persona armada inmediatamente vamos a aplicar la ley, vamos a proceder a su detención”.
“Es un acuerdo que más que nada ellos son los que lo están imponiendo, por mí que no vengan pues sirve que no se altera el orden aquí en Chilapa, porque también los pobladores están muy inconformes con la presencia de ellos”, agregó.
Según el mando castrense, el Ejército con 50 soldados trabaja en Chilapa desde hace una semana para detener “tanto a los líderes de los supuestos Rojos y de los supuestos Ardillos, son dos grupos armados que andan de forma ilegal trabajando aquí en Chilapa”.
En caso de una nueva incursión de los pobladores armados descartó que el Ejército los vaya a confrontar: “La orden es de preservar la paz social en Chilapa, no es nuestra intención confrontarnos con ellos que son habitantes aledaños, ni con los pobladores de Chilapa”.
Dijo que es probable que personal militar y la policía estatal instale retenes en los accesos a la ciudad.
Respecto a las personas desaparecidas que reportadas por vecinos en sus manifestaciones en rechazo a los civiles armados, comunicó que a ellos les han llegado tres reportes de personas desaparecidas, y que dentro de sus facultades instruyó a los familiares a acudir al Ministerio Público para levantar la denuncia.
Dijo que la Policía Estatal también ha recibido reportes al respecto, pero no dijo cuántos.

No encontró al convoy armado que entró el miércoles

De la actuación del Ejército en la incursión que usuarios de las redes sociales reportaron de un comando fuertemente armado por las calles del centro de la ciudad, el miércoles a plena luz del día, el mando militar respondió:
“Yo estuve actuando, estuve haciendo recorridos todo el día aquí en Chilapa, precisamente verificando la presencia de ese grupo armado que anduvo aquí que según andaban en siete camionetas, pero no hubo resultados positivos, anduve dando vueltas pero no, estuve en Acatlán, en Zitlala, Xochimilco, hacia Tlapa y no encontré ningún grupo armado como se decía en las redes sociales”.
Ayer se observó poca afluencia vehicular y de pobladores, a pesar de que la mayoría de establecimientos se encontraron abiertos.
Algunos establecimientos abren tarde y cierran temprano. El domingo de tianguis pasado lució desolado.
Incluso en el mercado nuevo desde la irrupción de los civiles armados hubo puestos que ya no abrieron.