Pide el Casa Inn a policías federales desalojar las habitaciones por falta de pago del gobierno estatal

*El monto que se adeuda es de más de 14 millones de pesos desde septiembre del año pasado, señala el gerente. Las autoridades nos exigen un convenio por escrito, se queja. En la misma situación están el Crowne Plaza, el hotel Caleta, así como uno de Chilpancingo y otro de Tierra Caliente

Mariana Labastida

La gerencia del hotel Casa Inn pidió a los policías federales hospedados ahí que desalojen sus habitaciones, debido a que el gobierno del estado no se quiere hacer responsable del pago por los cuartos desde septiembre a la fecha, lo que suma ya 14 millones 271 mil pesos.
El gerente de la hospedería, Silvestre Luna Bedolla, explicó que ellos recibieron a los agentes federales desde octubre de 2012 y que la administración de Rogelio Ortega Martínez no quiere hacerse responsable del pago porque no existe un convenio o contrato por escrito. Incluso el gobierno del estado le debe a otros cuatro hoteles, indicó el hotelero.
Por la mañana, el gerente del hotel Casa Inn denunció el adeudo del gobierno del estado con ellos, que corresponde a la renta de habitaciones para los policías federales de septiembre hasta ayer 20 de mayo. Y anunció que a la 1 de la tarde bloquearían las habitaciones ocupadas por los efectivos y les pedirían que las desalojen.
A la 1 de la tarde, los trabajadores del hotel colocaron en las ocho habitaciones que seguían ocupadas un “aviso urgente”, en el cual explican a los policías, a los que agradecen su preferencia, que debido a la falta del pago tanto del gobierno del estado y la Policía Federal “nos vemos en la penosa necesidad de solicitarles que hagan el desalojo de sus habitaciones”.
En el escrito se indica que quienes quisieran permanecer en el hotel tendrían que pagar la noche directamente al hotel, con una tarifa preferencial de 750 pesos, que incluye impuestos y el desayuno para dos personas.
De querer permanecer en el hotel les pidieron a los interesados en pasar a la recepción. “Lamentamos que tanto el gobierno del estado como sus mandos nos hayan puesto en esta situación tan penosa”.
Luna Bedolla informó que el Casa Inn recibió a los policías federales desde octubre de 2012, que no se hizo un convenio o contrato por escrito sino que fue a través del entonces secretario general de Gobierno, Humberto Salgado, quien eligió a los hoteles donde se instalaría a los federales y se empezó a pagar por el servicio de manera puntual.
Pero en junio del año pasado comenzó el rezago en pagos y en octubre, cuando se dio el cambio de administración, la delegada administrativa de la Secretaría de Gobierno, Verónica Sánchez, notificó al actual gobierno que había 48 facturas pendientes por el hospedaje.
En diciembre le abonaron al Casa Inn 5 millones de pesos por el adeudo pendiente.
“Ahora resulta que me exigen un convenio, un contrato cuando este servicio se prestó a petición del gobierno del estado en aquel entonces para apoyar el programa de Guerrero Seguro”, señaló Luna Bedolla.
El gerente del Casa Inn explicó que envió oficios en noviembre y diciembre al gobierno del estado para solicitar el pago de las habitaciones ocupadas, y que en diciembre la respuesta fue que lo pidiera a la Policía Federal.
Agregó que entregó también documentos al comisionado general de la Policía Federal, Enrique Galindo Ceballos, y al comisionado de Seguridad, Alejandro Monte Rubido, de los cuales no recibió ninguna respuesta. El último oficio que envió fue el pasado de mayo para solicitar una audiencia con el gobernador.
“Hemos sido prudentes, pacientes y decentes, creo que no merecemos este trato, este hotel es una empresa mexicana que da empleo a un poco más de 500 familias ¿se trata de generar más inversión o quebrar empresas como nosotros que estamos considerados quiebra técnica?”, reprochó.
Agregó que las habitaciones ocupadas eran avaladas por un mando de la Policía Federal que autorizaba el uso, y que esa relación es la que entregan al gobierno del estado para que se les pague, pero que no quiere responder por ese adeudo.
Casa Inn recibió a los policías federales en octubre de 2012 y desde entonces mensualmente tenían en promedio entre 80 y 90 habitaciones ocupadas, indicó el gerente.
Marzo fue el último mes en que tuvieron 80 habitaciones ocupadas por los federales, en abril disminuyó a 40 y para mayo solamente tenían las habitaciones que seguían ocupadas ayer que eran ocho.
Además de los tres camiones rinocerontes que estaban en el estacionamiento y que también pidieron a la Policía Federal que los sacara de ese lugar.
Otro de los hoteles con los que el gobierno del estado tiene adeudo por el mismo concepto de hospedaje y alimentación es con el Crowne Plaza, y la gerente Elvia Zavala informó que le deben 245 mil pesos desde diciembre.
En un principio la administración de Rogelio Ortega reconoció la deuda con las hospederías y les pagaron una parte y lo que están pidiendo los hoteleros es que se cubra lo que resta.
Elvia Zavala solicitó “que se haga frente a un servicio que nos solicitó el gobierno del estado, no importa si cambian de camiseta, de persona, hay un compromiso que hicieron con la iniciativa privada”.
Indicó que ellos rentaron 10 habitaciones por dos años, las cuales desocuparon en junio del año pasado pero quedó el adeudo por la renta.
La gerente preguntó qué pasa con los intereses de la deuda, ya que cuando se deben impuestos al estado éste no perdona los atrasos.
Otra de las hospederías que mencionaron los gerentes con el que el gobierno del estado también tiene deuda es el Hotel Caleta, y saben de dos más, uno en Chilpancingo y otro en Tierra Caliente.