Enfrentan otro proceso penal los líderes de la CRAC de Costa Chica; se definirá el martes

Carlos Moreno A.

El coordinador de la Policía Comunitaria en Costa Chica, Eliseo Villar Castillo y la coordinadora Adelaida Hernández Nava enfrentan un nuevo proceso penal en el Juzgado Cuarto, por los delitos de robo calificado y privación ilegal de la libertad.
El viernes en la tarde hubo otra orden de aprehensión en contra Villar Castillo en el juzgado Sexto Penal, pero no se informó del delito del que se le acusa en este nuevo proceso penal.
Con estos procesos penales Villar Castillo suma cinco, uno por lesiones y robo calificado en el juzgado Décimo, otro por privación de la libertad personal en el juzgado Primero, uno más en el juzgado Quinto por secuestro y los dos actuales de robo calificado con privación ilegal de la libertad en el juzgado Cuarto, y en el juzgado Sexto lleva otro proceso, del cual no se informó del delito.
Hernández Nava enfrenta también tres procesos, uno en el juzgado Décimo por lesiones y robo calificado, otro en el juzgado Quinto y otro en el Tercero, en ambos por secuestro.
En el juzgado Cuarto en el expediente bajo la causa penal 52-2/2015 el agraviado es Manzo Gatica, quien declaró que el 20 de octubre del año pasado en San Luis Acatlán estaba en la carretera Marquelia-Tlapa cuando ingresaron policías comunitarios a su casa, quienes iban al mando del comandante Iván.
Manzo Gatica denunció en su declaración ministerial que los policías comunitarios lo golpearon, lo esposaron y lo subieron a una camioneta para trasladarlo a una Casa de Justicia, donde estuvo hasta el 23 de octubre. Después lo sacaron y se lo llevaron a otra comunidad hasta el día 27 que hubo la intervención del gobierno del estado y recuperó su libertad.
En su declaración preparatoria bajo el exhorto 12/2015 que se llevó a cabo el viernes en la tarde, Villar Castillo y Hernández Nava negaron que cometieron dichos delitos, e indicaron que Manzo Gatica fue detenido debido a que en estado de ebriedad le disparó a una patrulla de la Policía Comunitaria y los policías comunitarios le aseguraron una pistola calibre .38 súper y un revolver, y aceptaron que lo llevaron detenido y después fue puesto en libertad por la intervención del gobierno del estado.
El martes se decidirá la situación jurídica en este proceso de Villar Castillo y Hernández Nava, y el juez dictará el auto de formal prisión o de libertad.
El viernes en la tarde el Ministerio Público cumplió otra orden de aprehensión contra Villar Castillo, y fue puesto a disposición en el juzgado Sexto penal pero no se informó del delito.