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Recorre Ortega obras inconclusas; le reclaman en el Zócalo el cierre de negocios por el atraso

*En la plaza Juan Álvarez los locatarios exigen apoyo, pues los trabajos llevan ya un año. El edificio Inteligente se entregará a finales de julio, anuncia el subsecretario de Obras Públicas estatal. Supervisa también el puente Bicentenario, los talleres del Acabús y el hospital de hemodiálisis que se edifican en El Quemado y a la zona del Macrotúnel, por la Escénica

Jacob Morales Antonio

El gobernador Rogelio Ortega Martínez recorrió ayer las obras inconclusas en Acapulco, como la remodelación del Zócalo, el edificio Inteligente, el Acabús y el Macrotúnel.
En el Zócalo, locatarios que han sido afectados por la remodelación desde junio pasado, le reclamaron al gobernador la lentitud y la falta de apoyo, lo que ha ocasionado el cierre de unos ocho comercios.
En breves declaraciones sobre el paro de labores en Fideaca, Ortega Martínez advirtió que los trabajadores pueden perder su empleo porque la dependencia es un Organismo Público Descentralizado (OPED) y se encuentra en quiebra pues no genera recursos.
A las 11:30 de la mañana, Ortega Martínez, acompañado de su esposa Rosa Icela Ojeda, el secretario de Finanzas, Eliseo Moyao; el secretarios de Fomento Turístico, Sergio Salmerón Manzanares; de Salud, Edmundo Escobar Habeica; el subsecretario de Obras Públicas, Luis Flores Guevara, y el director de la Promotora de Playas, Javier Saldívar, llegó a la plancha del Zócalo, donde fueron colocadas fuentes danzarinas, piso nuevo y se quitó el quiosco.
A petición de los locatarios los atendió en las mesas ubicadas afuera de una paletería y allí
le reclamaron la lentitud de las obras que en junio cumplirán un año, las cuales son del gobierno federal y estatal, mismas que debieron ser entregadas antes del Tianguis Turísticos que se realizó en abril pasado.
“Lo que pasa aquí es que nos quieren cerrar tres meses, queremos que nos dejen trabajar. Que nos dejen abierto este pasillo aunque sea”, demandó el comerciante Víctor Hugo Castellanos, y es que parte de la remodelación también incluye la renovación de la fachada de los edificios que dan al Zócalo y eso implica cerrar los negocios.
Abundó que “estamos en la cuerda floja porque tenemos 40 años rentando aquí y los dueños nos están aguantando, ya debemos un año de renta”, y solicitó al gobernador una indemnización.
Por su parte, el restaurantero Luis Antonio Martínez reclamó que el Empleo Temporal se entregó de manera directa a los trabajadores de los negocios y que luego éstos renunciaron.
Ortega Martínez prometió una ayuda a los comerciantes pero no dijo qué, y agregó que espera que pronto terminen las obras. Además se comprometió a atenderlos locatarios en una reunión hoy en Acapulco.
A las 12:30 de la tarde, el gobernador caminó del Zócalo a la calle cerrada de Morelos, donde recorrió la remodelación de las casas y oficinas municipales que se ubican frente al Fuerte de San Diego.
Después a pie y rodeado de sus guardaespaldas, a la 1 de la tarde visitó el edificio Inteligente ubicado en la equina de la Vía Rápida y la Costera. Ahí se indicó que a finales de julio será entregado el inmueble y que será ocupado por oficinas del gobierno del estado.
El subsecretario de Obras Públicas, Luis Flores Guevara, explicó que la obra lleva un avance de 85 por ciento y se entregará a finales de julio.
Precisó que sólo falta la colocación del cableado eléctrico, acabados en pisos y paredes, además del drenaje.
Ortega Martínez después en automóvil se trasladó a la estación del Acabús ubicado frente al Palacio Municipal y caminó hasta las obras de la ampliación del puente Bicentenario y del muro de contención al lado del Ayuntamiento.
Luego constató las conclusiones de la ampliación del puente Bicentenario y ahí el subsecretario de Obras Públicas le explicó que sólo se hacían trabajos menores y que la obra estaba prácticamente terminada.
El gobernador por la tarde también visitó la construcción del hospital de hemodiálisis que se construye al lado del hospital Raymundo Abarca Alarcón, el terreno donde se edifica el nuevo Hospital General, en el poblado de El Quemado, y ahí mismo visitó el terreno sede del estacionamiento del Acabús.
Su recorrido finalizó en las obras del Macrotúnel, en la parte que sale en el fraccionamiento Joyas de Brisamar, subiendo por la avenida Escénica.

Los empleados de Fideaca pueden perder su trabajo

Sobre el paro que iniciaron los trabajadores del Fideaca, que exigen el pago de su aguinaldo y un bono semestral que se les adeuda desde diciembre, Rogelio Ortega indicó que el conflicto se resuelve en la Secretaría del trabajo y en la Secretaría de Fianzas del estado.
“Que tengan mucho cuidado porque puede pasar lo mismo que con los trabajadores del Poder Judicial, nosotros les hicimos una oferta desde el principio y levantaron su paro después de 40 días su paro aceptaron nuestra oferta”, explicó.
Sobre Fideaca señaló que “ese tipo de OPD tiene patrimonio propio, fueron diseñadas para que fueran autosustentables y sostenidas con recursos propios, pero no solamente no tienen recurso propios sino que están en quiebra, es lo que tienen que pensar los trabajadores, estamos en el límite de que esa OPD pueda ser clausurada y entonces ellos puedan perder su empleo –¿es una advertencia?– claro es una advertencia”.

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