Cierran taxistas y organizaciones del PRI todas las entradas a Tlapa para evitar que llegue ayuda al MPG

*No son de un grupo de choque los que desalojaron violentamente a los activistas por Ayotzinapa, él no encabezaba y actuó prudente, pero el conflicto “se salió de las manos”, dice el delegado de la colonia Caltitlán, Ever Mateos. No sabe si alguien estaba ebrio, las llamas ya estaban ahí y se extendieron a las dos camionetas, se deslinda

Carmen González Benicio

Tlapa

Los transportistas de los sitos de taxis Señor del Nicho, Juárez y otras organizaciones afines al PRI cerraron todos los accesos a la ciudad, supuestamente para evitar que gente externa entre a respaldar a los activistas del Movimiento Popular Guerrerense (MPG), a quienes desalojaron de manera violenta del Ayuntamiento que mantenían tomado desde el 17 de octubre en exigencia de la presentación de los 43 normalistas.
Los taxistas colocaron sus unidades en las calles aledañas al Ayuntamiento, en las entradas desde Chilapa y Puebla, y en puntos intermedios de la ciudad como el acceso a la comunidad de Atlamajac, por el puente que comunica con Ahuatepec Pueblo “porque nos dijeron que va a venir gente de fuera a respaldar al MPG y vamos estar alertas porque ya no estamos de acuerdo”, mencionó uno.
En el lugar estuvieron desde las 7:00 de mañana hasta casi las 2:00 de la tarde, luego se concentraron en el centro de la ciudad donde permanecían al cierre de la edición.
En la mañana vecinos de las colonias Caltitlán, El Peligro y otras, así como transportistas que en la madrugada desalojaron al MPG armados con palos, tubos y machetes, y algunos en estado de ebriedad, se mantuvieron con el control del Ayuntamiento.
Se vieron dispersos por el inmueble algunos policías municipales, estatales y federales de caminos, y el área fue acordonada con una cinta amarilla.
De la quema de la papelería electoral por el MPG que el lunes entró a la sede del 28 distrito electoral del Instituto de Participación Ciudadana (IEPC), quedaron las cenizas que algunos ciudadanos se llevaron.
Los trabajadores de limpia del Ayuntamiento recogían lonas, cenizas, cajas de productos que no se consumieron ya que el grupo que desalojó a los del MPG quemó varios puestos de los comerciantes de verduras, principalmente.
De la camioneta quemada sólo quedó el esqueleto y la lumbre causo afectaciones a la pared y el piso, las que fueron golpeadas y ponchadas las llantas fueron recogidas por una grúa y sacadas de la calle, el auditorio fue abierto, ahí estaban otras unidades que el MPG había decomisado a dependencias federales y estatales, así como una camioneta blindada del gobernador, pero de ellas no se supo su destino.
La reportera buscó a las personas para que dieran su opinión sobre los hechos y uno de los taxistas dijo que en la información no se manejara que habían participado transportistas, se le comentó que eso no era posible porque se consignaban los hechos y era visible por sus unidades y todos llevaban uniforme, pero insistió en que se omitiera eso.
Se les pidió que dieran su versión porque durante el desalojo nadie quiso hablar, pero antes de que dieran la información dijeron que los hechos habían sido distorsionados y leyeron la nota publicada en El Sur, “yo no iba alcoholizado”, dijo uno y se le respondió que se había puesto que fueron algunos, sobre todos los jóvenes que se acercaron con machetes, tubos y palos a las reporteras para decirles que no podían tomar fotografías.
Dijeron que otro dato erróneo fue que no eran de ningún partido sino el pueblo, pero el líder del sitio de taxis Señor del Nicho, Rolando Morales es hermano del candidato del PRI a la alcaldía de Tlapa, Javier Morales, este sitio es una escisión del sitio Juárez pero ambos respaldan al candidato porque cuando fue diputado local les dio concesiones, comentó otro transportista consultado y todas sus unidades llevan propaganda.
Además el delegado de Caltitlán, Ever Mateos era del PRD y como no lo designaron candidato se fue al Partido de los Pobres, cuyo candidato a la presidencia municipal, Francisco Zurita Mejía fue otro de los que encabezó el desalojo junto a muchos identificados como militantes del PRI.

“A la gente enardecida no la vas a poder parar”

Los taxistas y delegados se molestaron por la información publicada, y en tono amenazante rodearon a esta reportera, después comentaron que las cosas habían estado tensas por la irrupción del MPG en la colonia, y “a la gente enardecida no la vas a poder parar, aunque hubo diálogo las cosas se dieron, paso lo que pasó, no se quiso afectar a terceros”.
Agregó que se pidió apoyo al sitio y que no estaban comandados por líderes políticos, que sólo estaban cansados del movimiento y esa lucha social que se convirtió en lucha sindical. Agregó que había despensas caducadas en el auditorio.
Ever Mateos dijo que no hubo ningún grupo de choque ni partidos, sólo familias que fueron apoyar, “las familias desconocíamos si ahí estaba la bodega del INE cuando llegaron encapuchados a sacar el material, y por eso la gente se pregunta qué pasaba”.
Remarcó que él no encabezaba pero actuó lo más prudente al pedir el diálogo y al MPG que no entrara a las colonias o casas para evitar confrontarse pueblo contra pueblo ya que no llevaban ningún planteamiento de desalojo, “pero se salió de la manos porque había esa sensación de provocación”.
Mencionó que no sabía si alguien estaba ebrio, que las llamas ya estaban ahí, y no se incitó a nadie.
La conversación terminó porque dijeron que un grupo de personas con tubos y palos iba al lugar y que se concentrarían en el inmueble, pero esas personas no llegaron, ya que eran los damnificados que se apostaron en la carretera federal a Puebla para exigir maíz, pero no iban armados.
Dijeron que estaban haciendo un volante que firmarían los delegados que se sumaban a la acción, y el texto decía que el MPG actuó contra vecinos del barrio Caltitlán al entrar de manera violenta a tres casas en busca de las boletas, y en ellas se encontraban menores de edad, un anciano y una minusválida con problemas cardiacos, y que estuvieron a punto de atropellar a una niña.
En el texto se lee que eso ocasionó que los vecinos se organizaran y tocaran las campanas para defender su integridad, y al reunirse acordaron buscar un diálogo con los del MPG para que les explicaran porque entraron de esa forma a su barrio.
Menciona que llegaron al Ayuntamiento y ahí se encontraron con Ubaldo Segura y Elmer Pacheco y otras 30 personas más, se les hizo ver “que habían rebasado los límites de la tolerancia y se les pidió que abandonaran el Ayuntamiento que por varios meses tenían secuestrado”.
Detalla que el MPG no aceptó y antes de retirarse del lugar “prendieron fuego a la papelería electoral que saquearon de uno de los domicilios perpetrados en la colonia, lo que ocasionó que se propagara a una de las camionetas”.
“Nos permitimos informarle al pueblo en general que nos deslindamos de todo hecho violento y exhortamos al pueblo en general”, lo firman y sellan delegados de Caltitlán, Cuba, El Peligro, y el sitio Juárez.
Después de que el Ayuntamiento fue entregado a las autoridades municipales las labores de limpieza continuaban, trabajadores lavaron el Zócalo con pipas de agua. Los taxistas dejaron sus unidades en las calles aledañas al Palacio Municipal.