Sigue cerrado el Ayuntamiento de Tlapa tras el desalojo del MPG; se abrirá luego de un inventario

*Llegan a la ciudad policías federales, mientras estatales y municipales vigilan el Palacio Municipal

El Palacio Municipal entregado al gobernador Rogelio Ortega Martínez el martes por colonos y transportistas afines al PRI, quienes de ahí desalojaron violentamente al Movimiento Popular Guerrerense (MPG) la noche del lunes, se mantiene cerrado y vigilado por policías municipales y estatales.
Al mediodía de este miércoles en un recorrido por el centro de la ciudad se observaron las calles despejadas, después de que habían sido tomadas por taxistas de los sitios Juárez, Señor del Nicho y los Federados.
A la ciudad llegaron dos autobuses con policías federales y están en el cuartel de la Policía del Estado, donde permanecen con varias patrullas.
El Ayuntamiento por el que Ortega Martínez viajó a esta ciudad a la que no había acudido desde que asumió el cargo, se encontraba cerrada, y afuera estaban algunas sillas ocupadas por personas vinculadas al grupo de choque que desalojó con palos, tubos y machetes (con algunos de sus integrantes alcoholizados), tras la irrupción del MPG en una casa particular rentada a la sede del 28 distrito electoral local del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC), de donde extrajeron paquetería electoral que luego incendiaron.
El grupo que desalojó a los activistas por la presentación con vida de los 43 normalistas de Ayotzinapa, era liderado por militantes priistas, del Partido de los Pobres de Guerrero y transportistas.
Al respecto el presidente municipal, Isaías Rojas comentó que el Ayuntamiento aún no se abriría porque estaban revisando cada área, para hacer un inventario, ya que es una responsabilidad de los funcionarios municipales entrar sin saber si falta algo.
Mencionó que harán la revisión departamento por departamento, que el síndico municipal José Franco es el encargado de hacerlo, y que hasta que se concluya abrirán.
Se le preguntó porque seguían ahí los vecinos y dijo que ellos así lo acordaron tras insistir que se abriera el inmueble pero les dijeron que no era posible antes de que se realizara un inventario, porque luego las responsabilidades jurídicas son contra las autoridades. Dijo que le respondieron que ahí se iban a quedar y le pidieron que estuviera atento a lo que pudiera pasar.
El edificio se encontraba resguardado por policías municipales y estatales, estos últimos con escudos.
Durante el tiempo que el MPG mantuvo tomado el Ayuntamiento las puertas permanecieron cerradas, ya que usaban la sala de regidores como su espacio de deliberación, y en su momento dijeron que lo hacían para evitar que dijeran que después faltaban cosas. (Carmen González Benicio / Tlapa).