Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Se presentan 170 aspirantes al examen de primer ingreso para la Normal Rural de Ayotzinapa

Los jóvenes candidatos se reúnen con el comité directivo estudiantil, donde se reconoce que la pobreza y las ganas de sobresalir hicieron posible la continuidad de la escuela, la que depende de la matrícula para su permanencia

 

Lourdes Chávez

Tixtla

De 220 fichas distribuidas, 170 aspirantes se presentaron al examen de admisión a la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, donde se admitió que se temía que la convocatoria no tuviera respuesta, por la criminalización a los estudiantes durante el movimiento por la presentación con vida de 43 alumnos desaparecidos el 26 de septiembre en Iguala, informó el dirigente estudiantil, Omar García.
Después de la aplicación del examen, a cargo de la Universidad Autónoma de Hidalgo, los aspirantes se reunieron con el comité directivo estudiantil, y Omar García reconoció que la pobreza y las ganas de sobresalir hicieron posible la continuidad de la normal rural, la que depende del nuevo ingreso para su permanencia.
Informó que en la reunión preguntaron a los aspirantes a cuántos de ellos sus padres les pidieron reflexionar sobre su ingreso a la normal, y todos levantaron las manos, pero aún así se animaron y hay suficientes aspirantes para completar la matrícula de 140 alumnos de primer grado.
Recordó que después de la represión del 12 de diciembre de 2011, en Chilpancingo, donde fueron asesinados los normalistas Jorge Alexis Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Jesús, disminuyó el número de aspirantes, que antes ascendían a más de 500.
Indicó que los resultados de la evaluación, que incluye un estudio socioeconómico y una semana de adaptación, se tendrán a fines de junio. La convocatoria señala el 14 de julio como la fecha para la difusión de resultados.
Aceptó que habrá cambios en el enfoque de la estructura y de la organización, para ser autogestivos, y la oferta para los alumnos de nuevo ingreso es la formación de docentes críticos, con educación política y mantener la lucha por los 43 alumnos desaparecidos en Iguala.
Reconoció que el año pasado a duras penas lograron salvar el primer semestre de este año escolar, y para concluir el año continuarán con las actividades extramuros, con la elaboración de ensayos y trabajos de investigación, para que puedan ser evaluados.
Consideró que hay garantías para terminar sus estudios, por los acuerdos previos con la Secretaría de Educación Pública, que se siguen revisando con las autoridades estatales.
Sobre la lucha estudiantil por la presentación con vida de 43 alumnos detenidos en Iguala, aceptó que tomará un rumbo distinto, “queda el marco legal y el Estado tiene que acatar las recomendaciones que emita la Comisión Interamericana de Derechos Humanos”.
Aceptó que después del 7 de junio la presión disminuye y se van a enfocar a nuevas formas de lucha, “en estos meses va a cambiar mucho”.
“Somos claros, dijimos no a la elección porque no queremos más narcopolíticos en el poder (aseguró que esta situación está documentada en los archivos del gobierno), pero los policías nos tienen encerrados, para que evitar actos en las elecciones”.
Sin embargo, señaló que el boicot no es el fin, sino una coyuntura en la la lucha por los 43, y no saben cuánto va a durar, pero la escuela seguirá siendo la sede del centro de apoyo para los padres de los desaparecidos.

468 ad