Denuncia la CNPA que el gobernador aplica una estrategia para desmovilizar a organizaciones

Lourdes Chávez

Chilpancingo

El representante de la Coordinadora Nacional Plan de Ayala (CNPA), Héctor Muñoz Guzmán denunció que el gobernador está implementando una estrategia para desmovilizar a las organizaciones, previa a las elecciones del próximo domingo.
En consulta telefónica, el representante legal de los líderes de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC), Eliseo Villar Castillo y Adelaida Hernández Nava, presos en el penal de Acapulco, reveló que un día antes le llamaron insistentemente para que no faltara ayer a una cita con el gobernador en Palacio de Gobierno a las 11 de la mañana, a la que el mandatario nunca llegó.
Consideró que este trato también implica una provocación para crispar aún más los conflictos en la entidad.
Ayer, por fuentes oficiales se supo que el gobernador Rogelio Ortega Martínez iba recibir a representantes de organizaciones que amenazaron con boicotear las votaciones como medidas de presión para la atención de sus demandas; pero el ejecutivo no llegó al edificio.
Indicó que, luego de varias horas avisaron a abogados y representantes de la Casa de Justicia de Juchitán que la reunión se posponía para las 6 de la tarde, en el mismo lugar. A las 4 de la tarde les dijeron que siempre no, que sería a las 10 de la noche en el hotel Playa Suite, en Acapulco. Por la noche, durante esta consulta, se informó que los líderes de la CRAC seguían esperando para ser atendidos.
Por otro lado, el abogado de la CNPA denunció que hace dos días Ortega Martínez entregó al coordinador de la Casa de Justicia de San Luis Acatlán, Abad García García, la Casa de Justicia de Espino Blanco, la que Villar Castillo gestionó con el exgobernador Ángel Aguirre Rivero.
Cuestionó que reconozca a la fracción de Abad García, que ahora persigue y amenaza a los colaboradores y familiares de Villar.