El presidente de la Cámara amaga con dejar la coalición de Rousseff

El presidente de la Cámara baja brasileña, Eduardo Cunha, afirmó ayer que el Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), de la base oficialista de la presidenta, Dilma Rousseff, no repetirá su alianza con el gobernante Partido de los Trabajadores (PT) en las elecciones de 2018.
“El PMDB difícilmente repetirá la alianza con el PT en algún momento. No repetirá”, afirmó Cunha en una entrevista publicada ayer por el diario “O Estado de Sao Paulo”.
Cunha, un importante líder del PMDB, que viene liderando iniciativas a las que el Ejecutivo se opone, afirmó que “el modelo del PMDB con el PT está agotado” y resaltó que su formación “va a buscar su camino en 2018”, cuando se celebrarán las próximas elecciones.
“No veo al PMDB de nuevo en una candidatura del PT”, comentó.
El PMDB, formación a la que pertenece el vicepresidente del país, Michel Temer, es la mayor fuerza electoral del país y el principal socio del Partido de los Trabajadores en la alianza de gobierno.
No obstante, en los últimos meses el Congreso, con la ayuda del PMDB, le ha infligido varias derrotas al gobierno en votaciones de proyectos legislativos vitales para el Ejecutivo pese a que Rousseff cuenta teóricamente con apoyo mayoritario en el Legislativo.
La crisis política establecida entre ambos partidos llevó a la presidenta brasileña a eliminar la secretaría de Relaciones Institucionales, que se encargaba de todas las negociaciones del gobierno con el Congreso y de delegar esa responsabilidad a su vicepresidente.
Cunha consideró que esta decisión “mejoró” las relaciones del Congreso con el Ejecutivo, aunque precisó que, “por el olor en los pasillos, todavía hay problemas con la propia base y con el gobierno”.
“Veo nítidamente que hay un intento de sabotaje del PT a Michel (Temer) dentro de la articulación. No tengo ninguna duda de eso”, subrayó el presidente de la Cámara baja.
Cuestionado por la caída de la popularidad de Rousseff, Cunha lo atribuyó al incumplimiento de las promesas electorales, al escándalo de corrupción en la petrolera estatal Petrobras, al empeoramiento de la situación económica y al deterioro del PT. (EFE / Sao Paulo).