El premio a Tlachinollan, conforme a la ley, dice el gobierno y reclama a Parra Bedrán

Redacción

El secretario general de Gobierno, Humberto Salgado Gómez, defendió la concesión del Premio al Mérito Civil al director del Centro de Derechos Humanos Tlachinollan, Abel Barrera Hernández.
El funcionario reprochó que el presidente del jurado para ese premio, Miguel Ángel Parra Bedrán, haya ventilado en los medios las resoluciones que se tomaron al respecto, en alusión al comunicado enviado por el universitario en los medios en el que informó que el premio fue declarado desierto y que en la lista de aspirantes considerados no estaba Abel Barrera.
En un comunicado del gobierno del estado, Salgado Gómez asegura que la entrega del Premio Estatal al Mérito en la Defensa de los Derechos Humanos “Nicolás Bravo” se entregó en estricto apego a la Ley de Premios Civiles del estado número 434, y en reconocimiento a la labor y trayectoria en el campo de la defensa de los derechos humanos de Barrera Hernández.
Explica que el Consejo de Premiación fue presidido por el secretario de Gobierno, quien de acuerdo con los artículos del 11 al 15 de dicha ley, tiene facultades para recibir, registrar candidaturas y en última instancia resolverlas.
Por eso, “dicha resolución fue emitida por el Consejo de Premiación en tiempo y forma, y ratificada en todos sus términos de acuerdo con la ley”,
Subraya además que con la designación del director del prestigiado centro Tlachinollan “se evitó que el premio quedara desierto en un momento en que se hace necesario levantar la bandera de los derechos humanos”.
Entonces reprocha: “El gobierno del estado lamenta que se haya violado el principio de reserva que consagra el artículo 21 de la referida ley, que a la letra dice: Artículo 21.- Los miembros del jurado están obligados a guardar reserva sobre los asuntos que conozcan en el ejercicio de sus atribuciones. El presidente y el secretario serán elegidos de entre sus miembros”.
Finalmente, el gobierno “reitera su política de diálogo con todos los actores políticos y sociales y hace un llamado a cerrar filas en torno a los intereses supremos del estado para sacarlo de los ancestrales problemas que padece”.
El lunes pasado, el abogado Parra Bedrán informó en un comunicado de prensa que el jurado calificador que él presidió declaró desierta la categoría de derechos humanos y acusó al gobierno del estado de haber premiado a Abel Barrera de manera “unilateral”.
El defensor de derechos humanos, al otro día, dijo que desconocía esta situación, pues a él sólo le informó el mismo secretario de Gobierno que había sido premiado, sin que le dieran cuenta del procedimiento que se utilizó para seleccionarlo.