Marchan en Tlapa estudiantes de la UPN para exigir justicia por el asesinato de Antonio Vivar

Denuncia la vocera de la colonia Zapata que un grupo de choque incendió una camioneta para provocar la irrupción de los federales a la CETEG, y la detención de profesores y vecinos del lugar

Antonia Ramírez

Tlapa

El Comité Estudiantil de la Licenciatura en Desarrollo Comunitario Integral (LDCI) de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN) marchó en forma pacífica para exigir justicia por el asesinato de su compañero Antonio Vivar Díaz a manos de policías federales el 7 de junio, durante la jornada electoral.
La marcha inició a las 5:50 de la tarde en el mercado Nuevo Horizonte para Guerrero, caminó por la avenida Colegio Militar y la calle Morelos, donde el 5 de junio los profesores fueron agredidos por policías estatales y un grupo de choque, y terminaron frente al Ayuntamiento municipal, que permanece desocupado desde el desalojo violento del 1 de junio por vecinos de las colonias Caltitlán, el Peligro, Las Palmas y San Nicolás, y transportistas de los sitios de taxis Juárez y El Señor del Nicho, vinculados al PRI y al Partido de los Pobres.
Los participantes acudieron vestidos de blanco con veladoras y velas en sus manos, y algunos llevaron flores.
Durante el recorrido, la vocera de la colonia Zapata dijo que el grupo de choque incendió la camioneta que ardió en el puente, para provocar la irrupción violenta de los policías federales a las instalaciones de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) y la detención de profesores y vecinos de la colonia Tepeyac.

Exigen justicia para los profesores agredidos el 5 de junio

Los participantes hicieron un alto en la calle Añorve esquina con Colegio Militar, en la colonia San Antonio, cerca de la casa del estudiante na savi de la LDCI, Antonio Vivar Díaz, adonde llegaron familiares del activista del Movimiento Popular Guerrerense (MPG).
Gritaron consignas como “Toño no murió, el gobierno lo mató” y “Toño vive, la lucha sigue”. Los participantes en la marcha permanecieron ahí unos 15 minutos.
A través del aparato de sonido se escuchaba la canción Cazando iguanas, compuesta por Antonio Vivar Díaz, Canción Guerrillera, Comandante Antonio, de los raperos, y el corrido que le compuso un vecino de la colonia Tepeyac.
Pararon nuevamente en la esquina del Súper Che, donde hicieron una recapitulación de los acontecimientos de los primeros días de junio, el gran despliegue de policías federales y militares en la región para imponer la elección ante el llamado del MPG a boicotearlas ante la falta de respuesta de los gobiernos estatal y federal a los padres de los 43 normalistas desaparecidos.
La marcha llegó al Ayuntamiento a las 8 de la noche. Ahí, la estudiante de la LDCI, Gudelia Santiago Díaz contó que compartió trabajo comunitario con Antonio en las localidades; contó cómo el joven se solidarizó con los pueblos afectados por la tormenta Manuel y el huracán Ingrid, armando despensas y llevándolas a las comunidades, y cómo se comprometía con la defensa del territorio contra las empresas mineras.
El delegado de la colonia Tepeyac agradeció el apoyo del 7 de junio, cuando los policías federales entraron a detener a profesores y vecinos provocando malestar, y que se organizaran para exigir su liberación y retuvieran a los policías federales como medida de presión.
Dijo que el gobierno miente al justificar la represión, “porque nosotros teníamos controlada la situación, al tener encerrados a los policías federales quienes eran la garantía para que regresaran con vida a las personas que se habían llevado”.
Agregó que el gobierno está sembrando delitos, que ya le informaron que hay una denuncia en su contra, pero que no teme porque sabe que actuó como autoridad para defender la integridad de sus vecinos detenidos sin orden de aprehensión.
Enfatizó que, ahora no creen en la seguridad que brindan los cuerpos policiacos porque en los últimos hechos han actuado reprimiendo a los ciudadanos.
Un estudiante del bachillerato de Tlaquilzinapa pidió que no dejaran morir la memoria de Toño y que las autoridades, como Peña Nieto, debían estar en La Montaña para sentir cómo se vive con salarios bajos.
El director del Centro de Derechos Humanos de La Montaña Tlachinollan, y profesor de la LDCI, Abel Barrera Hernández dijo que Vivar Díaz encontró en el MPG y la lucha por la presentación con vida de los 43 estudiantes de la Normal de Ayotinapa el amor a una causa.
Enfatizó que fue el Estado el que mató a Antonio Vivar y a otros estudiantes, y que no puede haber democracia cuando hay muertes, detenidos, represión, que por eso Toño había dicho no a las elecciones, porque son narcogobierno y se vislumbra una regresión al autoritarismo, y represión a los que se oponen al sistema neoliberal.
El integrante del MPG, Ubaldo Segura habló de los homicidios de luchadores sociales, y recordó que el grupo de choque ahora pide diálogo pero se lo pidieron antes de ser agredidos, y que no van a responder de la misma manera, pero que si algo les pasa no es su responsabilidad, porque “nuestra lucha es pacífica y de ideas”, remarcó.
Emplazó al gobernador a que, así como vino a abanderar al grupo de choque ahora venga a desactivarlo, y pidió la destitución del Comisionado de Seguridad, Enrique Galindo.