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Sólo una vez se llevó la dependencia la basura de la playa Manzanillo, se quejan comerciantes

A una semana del paso de la tormenta tropical Carlos, prestadores de servicios turísticos y pescadores de la playa Manzanillo que recolectaron basura por su cuenta en el malecón y la franja de arena, señalaron que la labor de la Promotora de Playas es lenta y selectiva.
En la esquina del malecón y la playa Manzanillo, que sirve también como embarcadero, se veía un contenedor de basura lleno, con hojas de arboles y ramas, además de pedazos de tablas y fragmentos pequeños de embarcaciones.
Alrededor del contenedor había deshechos esparcidos y casi enfrente estaba otro cúmulo de basura como cajas de botellas de licor, ramas de palmera secas y deshechos de comida, y de allí emanaba mal olor a pesar de ser paso obligado para los turistas que suben a las embarcaciones de recreo.
En un recorrido de ayer se observó una camioneta de carga rotulada con el nombre de Promotora y Administradora de Playas en el malecón de yates, a escasos metros del contenedor de basura.
De acuerdo con los pescadores de Manzanillo, la basura del atracadero era la que sacaron los trabajadores de esa dependencia con la barredora marina.
Señalaron que después de 10 minutos y a la mitad de la capacidad del vehículo los trabajadores se fueron, dejando todavía basura en ese punto.
El pasado lunes, el director de la Promotora de Playas, Javier Saldívar, recorrió la playa Manzanillo y le pidió a los prestadores de servicios que por la falta de personal ellos sacaran la basura del mar y la franja de arena, mientras que la dependencia se la llevaría. “Pero en la semana sólo pasaron una vez”, acusaron los comerciantes.
Los dueños de embarcaciones afectadas por las lluvias de la tormenta tropical Carlos insistieron en que urgen recorridos de la Marina o de cualquier otra fuerza de seguridad, porque, señalaron, siguen los robos a embarcaciones que permanecen encalladas o hundidas.
Se quejaron de que gente “extraña” llega por las noches y se mete al mar para sacar “lo que se pueda” y se retira en menos de media hora.
Lamentaron que no han recibido apoyo económico por parte de alguna dependencia municipal, estatal o federal, e insistieron en que ellos, los pescadores y dueños de embarcaciones pequeñas, son “a los que menos ayudan las autoridades, mientras que los restauranteros sí han recibido apoyo por afectaciones de fenómenos meteorológicos como el Mar de Fondo”. (Abel Salgado).

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