Actúan como si nada, recriminan a maestros de Ayotzinapa por el festejo para Ortega

“No se preocupan, ni les importa que nosotros estamos sufriendo por nuestros muchachos, que no aparecen”, reprocha José Ángel Navarrete, padre de un normalista desaparecido

Lourdes Chávez

Chilpancingo

El señor Emiliano Navarrete, padre del normalista desaparecido, José Ángel Navarrete, recriminó que los maestros de la Normal Rural de Ayotzinapa actúan como si nada hubiera pasado, como si no hubieran asesinado a tres alumnos, dos estudiantes en grave estado de salud y la desaparición forzada de 43 alumnos, en ataques de policías municipales en Iguala.
En respuesta a la comida que organizaron maestros de la Normal al gobernador Rogelio Ortega Martínez, en agradecimiento por la gestión de 50 millones de pesos para la operación de la Normal Rural, en un restaurante de Chilpancingo, según la declaración del director, José Luis Hernández Rivera, que se difundió este jueves.
Vía telefónica, el padre de familia reconoció que siente coraje por la posición de los docentes, y exigió a los gobiernos federal y estatal que les devuelvan a los desaparecidos y continúen con la normalidad que deseen.
Pero antes de saber de la reunión, señaló que varios padres de familia se siente preocupados, porque han observado el desinterés de los maestros, “no se preocupan, ni les importa que nosotros estamos sufriendo por nuestros muchachos, que no aparecen, lo único que les interesa es evaluarse e irse de vacaciones, definitivamente nos ignoran”.
Asimismo, señaló que los estudiantes están concluyendo el año escolar, y los líderes estudiantiles tampoco asumen la responsabilidad que les toca, “ya quieren seguir su vida normal”, lamentó.
Reprobó que los maestros se organicen para festejar al gobernador, “entendemos que las demás personas no sienten el dolor de un padre, pero esta escuela tiene un grave problema, le falta 43 jóvenes y mataron a tres más, cómo es posible que se mantengan indiferentes en el lugar de donde vienen, de donde son los jóvenes”.
De acuerdo con la nota del jueves, la comida en el restaurante Pepes era para el gobernador, pero no acudió por otras actividades de trabajo y envió en su representación al subsecretario de Educación Media y Superior, Inés Javier Casiano Riachi.
Destacó que fuera de la Normal han recibido el apoyo que no tienen de la planta docente, y que los maestros que dan clases en Ayotzinapa “sólo ven por su propio bienestar”.
Aclaró que los padres han tenido mucha consideración con la Normal Rural, pues permiten su operación y que se mantenga abierta, “hemos sido respetuoso, pero da coraje ver que tu hijo no aparece y aquí quieren seguir su vida, como si nada pasara. La escuela está llena de carros, aquí gana bien hasta el barrendero, los que están ahí trabajando no son gente de conciencia, son personas sin sentimientos”.
Subrayó que a él ya no le interesa la escuela, “si al gobierno le gusta estar así (en conflicto con los estudiantes), que nos devuelva a los nuestros”.
“Que me devuelva a mi hijo, yo no tengo que pelear todo el tiempo con el gobierno, yo quiero vivir una vida tranquila, pero que me entregue a mi hijo y sigo mi vida para adelante, pero no sobre la desgracia”.