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Costará 10 millones desmantelar muelle de Revolcadero; pagará la empresa del proyecto

En dos o tres semanas concluirán las labores, que por ahora costea el gobierno federal. Recorren el gobernador Rogelio Ortega, y funcionarios de Semarnat, Profepa, Conafor la zona donde se realizan los trabajos de la infraestructura. Protestan cooperativistas y exigen indemnización por daños

 

Karla Galarce Sosa

El secretario el Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Juan José Guerra Abud, dijo que el costo para retirar el acero que conformaría el muelle de playa Revolcadero costará unos diez millones de pesos, cantidad que será pagado “por completo” por la empresa Jar Estate Corp, que promovió el proyecto fallido.
No obstante, dijo a reporteros que el gobierno federal está pagando los gastos de los trabajos, aunque el monto deberá ser cubierto por la compañía que pretendía construir el muelle, y cuya concesión fue retirada por la violación a los condicionantes del título de concesión hace dos años.
Informó lo anterior durante un recorrido al que acudieron el gobernador Rogelio Ortega Martínez, el procurador del Medio Ambiente (Profepa), Guillermo Haro Belches, y el director de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), Jorge Rescala Pérez, así como los respectivos delegados en la entidad y el comandante de la Octava Región Naval, Ángel Enrique Sarmiento Beltrán.

Increpan cooperativistas a funcionarios

Durante el recorrido, integrantes de la Cooperativa 13 Estrellas increparon a las autoridades para exigir el pago de la indemnización a Álvaro León, encargado de los trabajos que realiza la empresa Oprinsa, subcontratada por la Secretaría de Marina (Semar) para el retiro de la estructura, pues hubo cierre del acceso desde el 30 de abril para habilitar una bodega, comedor y área de estacionamiento de la maquinaria pesada. Esto impidió que como cooperativistas colocaran mobiliario en la playa, pues es en ésta es donde se desarrollan los trabajos de desmantelamiento.
Al respecto, la delegada de la Profepa, Maricela Ruiz Massieu, dijo que no corresponde a la dependencia de la cual forma parte resarcir ningún daño. Sin embargo, los cooperativistas la acusaron de enviar a sus empleados a hostigarlos y amenazarlos. En respuesta, Maricela Ruiz se dijo dispuesta a recibir a los cooperativistas, aunque en declaraciones a reporteros, dijo que el local y el mobiliario de playa ocupan zona federal y obstruyen el paso: “eso corresponde a Conagua”, acotó, al señalar que el local del restaurante de los cooperativistas está sobre un cauce de agua.
Integrantes de la Cooperativa 13 Estrellas de playa Revolcadero se manifestaron con cartulinas y consignas durante la visita de supervisión que hicieron las autoridades estatales y federales, quienes recorrieron las obras de desmantelamiento del muelle que comenzó la empresa Jar State Corp hace cuatro años en el acceso a playa conocido como Punto Muerto, en la zona Diamante del puerto.
Exigieron ser indemnizados por el cierre del acceso a la playa, pues indicaron que desde que comenzaron las labores el pasado 30 de abril, elementos de la Secretaría de Marina (Semar) cercaron el acceso de playa para dar paso al retiro de pilotes de acero que compondrían el atracadero.
Los cooperativistas reprocharon que debido al cierre del acceso a la playa sus clientes no pueden ingresar al pequeño restaurant, y ellos tampoco pueden prestar sus servicios como renta de motos, caballos, masajes, sombrillas y lavado de coches en la calle.
Los quejosos intentaron dialogar con el gobernador Rogelio Ortega, pero apenas y fueron escuchados pues éste les dijo que tenía una gira.
En entrevista con reporteros, el gobernador manifestó que “en este tipo de trabajos al entorno le generan cierto malestar, le afecta su afluencia de clientes, pero cuando termina la obra todos quedan satisfechos. La obra es para bien del entorno y para quienes aquí prestan servicios de playa”.

Costará diez millones de pesos que pagará Jar Estate Corp

Por separado, el secretario del Medio Ambiente, Juan José Guerra Abud, señaló que el costo por el desmantelamiento del muelle será aproximadamente de diez millones de pesos.
Sostuvo que los trabajos estaban muy avanzados y estimó que “en dos o tres semanas” las labores, que incluyen el uso de dos grúas de 80 toneladas, quedarán totalmente concluidos y se recuperará la belleza natural del sitio.
“Es un obra que se tiene que realizar, lo mejor es pasar estos días de molestias y pasando esta molestia el acceso se va a volver a normalizar… se estaba generando un daño ambiental”, dijo el funcionario federal.
A pregunta de reporteros sobre la manifestación del jueves pasados por más de 150 personas en el bulevar Las Palmas, frente al acceso a la playa, comentó que “el paso es libre, cualquiera puede entrar, hay otros accesos a la playa, la autoridad tiene que cumplir con su responsabilidad de retirar esta obra que se hizo… si alguien tuvo una afectación en el corto plazo pedimos disculpas, pero debemos garantizar la seguridad, tanto de los cooperativistas como de los trabajadores”.
Añadió: “hay mucha maquinaria pesada, el desmantelamiento de los tubos, lo primero es salvaguardar a todas las personas, no quedará absolutamente nada, todos los pilotes serán retirados”.
Indicó que a pesar de que el gobierno federal se hace cargo de las obras de desmantelamiento de más de un centenar de pilotes de acero, “el que contamina paga, los que hicieron esta obra tendrán que rembolsar los gastos, ya la Profepa determinará si hay una multa”.

Violó Jar Estate condicionantes

En 2007, la empresa Jar Estate Corp pretendió construir un muelle para yates de lujo, pero debido a la violación a las condicionantes de la concesión que aprobó la Semarnat, –entre ellas rebasar la longitud que era de 273 metros (construyeron 314 metros), el cambio de materiales y el uso de aquellos inadecuados)– desencadenó la quejas de condóminos, prestadores de servicios turísticos y ambientalistas.
Ante ello, la Semarnat, ordenó suspender y luego de una investigación canceló la concesión, para posteriormente ordenar su demolición, luego de una proceso jurídico que duró dos años.
“Venimos a supervisar los avances en los trabajos para el desmantelamiento del muelle que ha generado muchos problemas y conflictos, que se estén llevando a cabo los trabajos, en dos o tres semanas esto quedará totalmente limpio y se volverá a recuperar lo ambiental”, dijo el secretario del medio ambiente, Juan José Guerra Abud, quien iba en compañía del almirante de la Octava Región Naval, Enrique Sarmiento Beltrán en un primer recorrido.
-¿El desmantelamiento ha ocasionado muchos problemas? –, preguntó una reportera.
-Es una obra que se tiene que realizar, lo mejor es pasar estos días de molestia que son dos o tres semanas, y pasando esta molestia se va a recuperar. Se estaba generando un daño ambiental -, justificó el funcionario del gobierno federal.
En tanto el almirante y comandante de la Octava Región Naval, Sarmiento Beltrán, precisó que se contrató a la empresa Oprinsa, para poder asegurar que se iba a hacer el trabajo. “Todo se está retirando, no va a quedar absolutamente nada”, aseguró el mando militar.
En tanto que el representante de la empresa, Álvaro León, ofreció una explicación de las maniobras que han tenido que emprender ante la presencia del Mar de Fondo, así como el paso del huracán Carlos, fenómenos provocaron el retraso en los trabajos del retiro de la superestructura.

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