Otros familiares de desaparecidos rechazan una placa en honor de Rosendo Radilla; no es el único, dicen

Francisco Magaña

Atoyac

11Aproximadamente medio centenar de familiares de desaparecidos de la guerra sucia integrantes del Comité de Defensores? en el Esclarecimiento de la Guerra Sucia de los Años 70 y 74, encabezados por su presidenta Eleazar Peralta Santiago, se presentaron en el Zócalo de Atoyac, para manifestar su rechazo a la colocación de una placa en honor al desaparecido por militares Rosendo Radilla Pacheco que se tenía previsto poner la mañana de ayer en el centro de la ciudad por el gobierno federal en seguimiento? la sentencia que emitió la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Coidh). Los familiares de desparecidos que no pertenecen a la Asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Víctimas de las Violaciones a los Derechos Humanos en México (Afadem), que preside la hija de Rosendo Radilla Pacheco, Tita Radilla Martínez, señalaron que no pueden permitir que se ponga una placa en el Zócalo en honor a Rosendo Radilla porque dijeron que no es el único desaparecido de la guerra sucia. “Los problemas de nosotros han sido grandes el gobierno hasta ahorita no nos ha dicho qué pasó con ellos, si están vivos o están muertos entonces que respeten por favor a todas las organizaciones, las instituciones, el federal y todo tipo de gobierno, esta postura”. Peralta Santiago está a favor de la reparación del daño a los familiares de los desaparecidos, con base el decreto que emitió el entonces presidente de la República Vicente Fox Quezada, y dijo que Felipe Calderón no lo ha cumplido y que por eso su organización demanda una audiencia con el presidente. Señaló que no se puede poner una placa sólo a una persona cuando hay cientos de desaparecidos, “no tienen por qué venir a poner una placa, que se considere a todos los desaparecidos y después de que se nos diga qué pasó con nuestros familiares, que se nos respete, nos están violando nuestros derechos, nos cargan dando muchas vueltas”. “No vamos a dejar que se ponga una placa”, insistió, porque pidió “un trato parejo para todos los familiares de los desaparecidos” y dijo que la mayoría son ya adultos mayores y enfermos. Cuestionó que el gobierno del estado está entregando también dinero de manera selectiva a algunos familiares. Citó el caso de la señora Gregoria Tabares Rebolledo de 76 años quien no sabe leer ni escribir, sólo la llamaron diciéndole que recibiera 10 mil pesos, no le precisaron si era un apoyo o finiquito por el caso de su pariente desaparecido, y manifestó que en caso de que sea un finiquito, no lo aprueba. Indicó que sus parientes desaparecidos son Cesáreo Villegas Tabares, Eusebio Villegas Ruiz y otra persona de la que no dio su nombre. Misa de los familiares de Rosendo Radilla y la Afadem Asimismo por separado, la Afadem celebró una misa en la iglesia de Santa María de la Asunción, para pedir por los desparecidos. En el acto religioso se observó a los hermanos de Tita Radilla y al secretario ejecutivo de la Afadem, Julio Mata Montiel. En el interior del templo se instaló una galería de fotografías de desaparecidos que la organización tiene documentados. La homilía fue oficiada por el párroco Rafael Valencia quien dijo que el arzobispo de Acapulco les enviará un saludo y oración por sus parientes que permanecen desaparecidos desde la llamada guerra sucia. La familia Radilla y la Afadem son las demandantes de justicia que obtuvieron de la Corte Interamericana de Derechos Humanos la sentencia que condena al Estado mexicano como culpable de violar los derechos humanos en el caso de la desaparición forzada de Rosendo Radilla Pacheco, en 1974. Para este lunes, originalmente estaba previsto un acto público en el que el gobierno mexicano ofrecería disculpa pública a los agraviados por el caso Radilla, en cumplimiento de una parte de la sentencia de la Coidh, pero ese acto se canceló, porque el miércoles se avisó a los familiares que no asistiría el secretario de Gobernación, Francisco Blake. El funcionario murió dos días después en un accidente aéreo con siete colaboradores.