Riesgoso, que el gobierno estatal compre el equipo Estudiantes Tecos, dice Burillo

Está en descenso y pierde dinero, subraya el dueño del Atlante. Recomienda construir primero un estadio en Acapulco

Salvador Serna

El presidente de Grupo Pegaso y dueño del club de futbol Atlante de Cancún, Alejandro Burillo Azcárraga, manifestó ayer que para el gobierno de Guerrero es un riesgo pretender comprar la franquicia de un club en peligro de descenso como el Estudiantes Tecos y que no está generando utilidades a sus actuales propietarios. En entrevista, sugirió que antes de comprar una franquicia, el gobierno estatal mejor construya un nuevo estadio de futbol con usos múltiples, para proyectar a la niñez y juventud guerrerense. “Estudiantes Tecos es un equipo que está en peligro de descenso, es un proyecto que es muy importante para el estado (de Guerrero), pero necesitamos primero tener un estadio y luego pensar a qué equipo traer, siempre hay equipos que tienen problemas económicos porque la situación del futbol mexicano así lo es, pero yo sugiero que primero pensemos en el estadio”, dijo. Agregó que “Tecos es un equipo que les está dando muchos problemas. (La familia Leaño) está perdiendo mucho dinero y creo que sí tienen interés en moverse, pero no conozco las ideas de Mohamed Morales, no conozco la seriedad de las negociaciones que se están llevando a cabo”, aseguró el también miembro del Consejo de Dueños de la Federación Mexicana de Futbol. Burillo Azcárraga, socio mayoritario del canal Televisa Deportes Network (TDN), agregó que la familia Leaño es la única que tiene la decisión final de vender la franquicia de Estudiantes Tecos, y no el consejo académico de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG). Al preguntarle si la Unidad Deportiva Acapulco es una buena opción para remodelarla y aumentar el aforo de aficionados para futuros proyectos deportivos de corte profesional, el empresario recomendó al gobierno del estado que mejor la venda, “porque ya no va a crecer más, está toda encerrada por las calles de alrededor y los accesos son muy difíciles, sería mejor el construir un centro comercial ahí, es muy fácil hacer otro estadio si se ponen de acuerdo la iniciativa privada y el gobierno del estado”. Reconoció la riqueza en la diversidad geográfica de Guerrero y dijo que tiene más condiciones que otros estados para tener un equipo de primera división: “Donde tú pongas el estadio vas a acelerar el desarrollo económico del estado y eso es importante que se sepa, Acapulco tiene para eso, tenemos aquí casi un millón y medio de gentes, primero el terreno, después el estadio y luego el equipo, y de inmediato un club de primera división A (Liga de Ascenso)”. Añadió que el costo total de un traslado como el que pretende el gobierno con Estudiantes Tecos se vislumbra complejo: “Son 15 millones de dólares en franquicia, otros 15 millones en jugadores y otros 30 millones del estadio”. Reveló la causa de que el Atlante se mudara a Cancún a pesar de haberse anunciado su cambio del estadio Azteca de la ciudad de México al puerto de Acapulco en el año 2005: “A como nosotros lo habíamos platicado con el (anterior) gobernador del estado, era la venta de los palcos, una mitad la íbamos a vender nosotros y la otra mitad el gobierno del estado, con ese financiamiento íbamos a construir el estadio y yo iba a poner el equipo (Atlante), así habíamos quedado, pero al final ya no se hizo nada”.