A partir de hoy autoriza la Iglesia las bodas en hoteles y playas de Acapulco: Garfias

Pide el arzobispo a los empresarios hoteleros “que respeten las normas y que estos enlaces no se reduzcan a productos comerciales”

Salvador Serna

El arzobispo de la Arquidiócesis de Acapulco, Carlos Garfias Merlos, anunció ayer que la reactivación del sacramento del matrimonio en las playas, hoteles y restaurantes de la franja turística es un hecho a partir de hoy, siempre y cuando los contrayentes cuenten con la autorización de la Arquidiócesis. “Nadie puede celebrar una boda en Acapulco, de acuerdo con la Iglesia católica, que no sea autorizada por un sacerdote o por mí”, expresó el arzobispo ante empresarios y prestadores de servicios turísticos en las instalaciones del hotel Elcano. Agregó que a partir de esta fecha “podrán celebrarse los matrimonios y otros sacramentos fuera de los templos parroquiales y capillas, en los hoteles donde ya se celebra la santa misa dominical de ordinario o en otros lugares previamente aprobados, siempre que sea conforme a las normas del derecho canónico expresadas con toda precisión en normativa anexa a este documento y que se realicen en acuerdo con los párrocos correspondientes, quienes serán los responsables de ofrecer esta concesión pastoral en la Arquidiócesis de Acapulco”. Los empresarios le preguntaron de qué forma se iba a resolver el problema de los falsos sacerdotes y de que algunos hoteles ya cuentan con sus propios párrocos para realizar las bodas, a lo que Garfias Merlos respondió que “los sacramentos son misterios de la fe y no simples eventos sociales, por lo que hago un llamado a los prestadores de servicios turísticos para que colaboren y que las normas sean apreciadas y respetadas, de manera que la celebración de los sacramentos en los espacios turísticos sean dignas y no se reduzcan a eventos sociales o a meros productos comerciales”.