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Pide perdón el Papa a los pueblos indígenas por el rol de la Iglesia en la conquista de América

*Critica Bergoglio el consumismo y la “lógica del descarte” que impera en el mundo. A la eucaristía asistieron el presidente Evo Morales y el vicepresidente Alvaro García Linera

DPA

Santa Cruz de la Sierra / La Paz / Santiago de Chile

El papa Francisco pidió ayer desde Bolivia perdón a pueblos indígenas por el rol que tuvo la Iglesia católica en la conquista de América en 1492 y los siguientes años.
“Pido humildemente perdón no sólo por las ofensas de la propia Iglesia sino por los crímenes contra los pueblos originarios”, dijo Francisco en una reunión con representantes de movimientos populares de 40 países en Santa Cruz de la Sierra.
“Se han cometido muchos y graves pecados contra los pueblos originarios de América en nombre de Dios”, insistió el pontífice, que pidió además a sus interlocutores proteger el medio ambiente, tema que se le ha hecho recurrente en los últimos meses.
“Sigan con su lucha y por favor cuiden mucho a la Madre Tierra”, pidió Francisco en la clausura del encuentro organizado por el Vaticano. “La casa común de todos nosotros está siendo saqueada, devastada, vejada impunemente”, denunció.
Mientras tanto, en la única eucaristía celebrada en su paso por Bolivia, el papa criticó la lógica del consumo que impera en un mundo en el que, dijo, todo es juzgado en términos económicos y de producción.
“En un corazón desesperado es muy fácil que gane espacio la lógica que pretende imponerse en el mundo de nuestros días. Una lógica que busca transformar todo en objeto de cambio, de consumo, todo negociable”, señaló en su sermón de ayer en Santa Cruz.
Agregó que existe “una lógica que pretende dejar espacio a muy pocos, descartando a todos aquellos que no producen, que no se los considera aptos o dignos porque aparentemente no nos dan los números”.
Francisco llegó a las diez en punto ayer por la mañana al altar chiquitano, una réplica de templo jesuita que existe en el interior del departamento de Santa Cruz, y fue recibido con la música de la misa criolla del compositor argentino Ariel Ramírez.
A la eucaristía de este jueves, celebrada a pies del Cristo Redentor, en el corazón de la ciudad más poblada de Bolivia, asistieron el presidente Evo Morales y el vicepresidente Alvaro García Linera, que se educó en el colegio católico San Agustín, de la ciudad de Cochabamba.
El momento de las peticiones sirvió para oír tres de las 36 lenguas habladas en Bolivia: guaraní, quechua y aymara.
La misa no estuvo exenta de alusiones políticas. El arzobipo de Santa Cruz, Sergio Gualberti, pidió “desterrar la corrupción parcializada de la Justicia” y respetar las diferencias ideológicas en Bolivia.
El encuentro contó con la presencia de miles de fieles que habían salido temprano de sus casas para hallar un buen lugar y de ciudadanos que viajaron desde otras partes del país y desde el norte de Argentina y el sur de Brasil.
Los organizadores no reportaron la cantidad de gente que colmó la zona del Cristo Redentor, pero los medios calcularon que hubo más de medio millón de personas.
Por otra parte, Francisco instó a los religiosos bolivianos a asumir un mayor compromiso con la feligresía y criticó la existencia de “castas diferentes” al interior de la Iglesia.
“Sean pastores, no sean capataces”, arengó el pontífice en un encuentro con sacerdotes, monjas y seminaristas de Bolivia y el norte argentino en el coliseo deportivo Don Bosco.
El seminarista Damián Oyola, de una familia minera del departamento de Potosí, dijo que en los 11 seminarios del país solo hay 121 estudiantes preparándose para ser sacerdotes.
La falta de religiosos bolivianos es una de las preocupaciones de la Iglesia y se busca que la llegada del papa sirva para la inclusión de más jóvenes.
“Reír con los que ríen, llorar con los que lloran, he ahí parte del misterio del corazón sacerdotal”, reflexionó el pontífice.
Al final de su segunda jornada en Bolivia, Francisco optó por realizar una visita privada a un antiguo amigo personal, el cardenal boliviano Julio Terrazas, internado por insuficiencia renal en una clínica privada.
El papa tiene programado para este viernes un encuentro con presos de la cárcel Palmasola, donde escuchará testimonios. Luego tendrá una reunión con obispos y después de mediodía proseguirá viaje a Paraguay, última etapa de su gira sudamericana que comenzó por Ecuador.

Polémica por el obsequio al Papa de un Cristo cruficicado con una hoz y un martillo

El crucifijo que le regaló el miércoles el presidente boliviano, Evo Morales, al papa Francisco, un tallado donde Cristo aparece crucificado en una hoz y un martillo, generó ayer revuelo en los medios y en las redes sociales, al punto que tuvo que salir a hablar sobre ello el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi.
Algunos medios difundieron incluso un video, con un audio no muy bueno, pero en el que, al parecer, el papa Francisco le dice a Morales al recibir el regalo en el Palacio Quemado, en La Paz: “No está bien eso”.
El regalo consistió en una réplica de un tallado que hizo el sacerdote jesuita Luis Espinal, asesinado por fuerzas de ultraderecha en 1980 en La Paz. La pieza original se encuentra en la sede de la Compañía de Jesús de la capital boliviana.
“Fue una creación de Espi-nal”, respondió ayer Lombardi ante el asombro de los periodistas, ya que la mayoría no sabía que era una réplica de un tallado hecho por el sacerdote.
Por otro lado, Chile valoró ayer el llamamiento del papa Francisco a un diálogo con Bolivia sobre el diferendo marítimo entre los dos países, y consideró que no supuso un respaldo a La Paz.
El canciller chileno se refería así a las declaraciones del pontífice, que llamó el miércoles en un acto en la Catedral Metropolitana de La Paz, a buscar soluciones compartidas sobre la demanda de La Paz de un acceso soberano al mar, enclave que perdió a manos de Chile en una guerra en 1879.
Así también, un grupo anónimo de paraguayos lanzó ayer, con humor, la candidatura del papa Francisco a la intendencia (alcaldía) de Asunción, al ver el impacto que generó la visita que hará entre este viernes y el domingo.

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