Marchan en Chilpancingo mil 500 maestros de la CETEG y normalistas contra la evaluación docente

*El contingente, en el que participan cetegistas de la fracción opositora y transportistas, se detiene frente a la 35 Zona Militar, donde lanzaron piedras, el Congreso y el Palacio de Gobierno

Alina Navarrete Fernández

Chilpancingo

Mil 500 integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG), del bloque opositor al secretario general Ramos Reyes Guerrero, la Coordinadora Estatal de Transportistas Independientes del Estado de Guerrero (CETIG) y el Frente Unido de Normales Públicas del Estado de Guerrero (FUNPEG), marcharon en la capital en contra de la evaluación del Servicio Profesional Docente y la reforma educativa.
La movilización la acordó la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), luego de que la Secretaría de Educación Pública (SEP) enviara notificaciones a los maestros, para que participaran “con caracter obligatorio” en la evaluación del Servicio Profesional Docente, en junio.
En respuesta a los avances en la aplicación de la evaluación, la CNTE marchó en contra del proceso en la ciudad de México y las secciones del magisterio disidente debían replicar la protesta en cada estado, para exigir que no haya represión en contra de los trabajadores que decidan no presentar el examen, ni enviar el expediente de evidencias que la SEP solicitó.
La marcha partió poco antes del mediodía, desde el monumento a Nicolás Bravo, El Caballito, hacia el sur de la ciudad, sobre los carriles de alta velocidad del bulevar Vicente Guerrero; el contingente se detuvo frente a la 35 Zona Militar, el Congreso local y por último, en el Palacio de Gobierno.
Durante el recorrido hacia el Palacio de Gobierno, los manifestantes escribieron consignas como “narcogobierno”, “fue el Estado”, “El Chapo (el narcotraficante fugitivo, Joaquín Guzmán Loera) evaluó y (el presidente de la República, Enrique) Peña Nieto reprobó”, así como el número 43, por los normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, entre otras, sobre las bardas de los edificios en los que se detuvieron.
Además, los manifestantes coreaban consignas como “de norte a sur, de este a oeste, ganaremos esta lucha, cueste lo que cueste”, “la CNTE no se vende”, “el magisterio unido, jamás será vencido”, “nos faltan 43” y “vivos se los llevaron, vivos los queremos”.
La avanzada de la CETEG, que conformaron cerca de 30 maestros que tenían el rostro cubierto, usaban gorras y algunos portaban resorteras o palos, se dedicó a mantener el orden en la manifestación, cuando un grupo de manifestantes trataba de lanzar objetos en contra de los edificios en los que se detuvo el contingente, lo impedía.

Piden que se abran los cuarteles para que se investigue al Ejército por el caso Ayitzinapa

Los manifestantes se detuvieron cerca de 10 minutos sobre el bulevar Vicente Guerrero, frente a la 35 Zona Militar, en donde exigieron que el gobierno federal abra las puertas de los cuarteles para que el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) pueda avanzar en su investigación del caso Ayotzinapa.
Un representante del magisterio disidente señaló que las autoridades castrenses y gobierno federal, están empeñados en mantener cerrados los cuarteles militares, debido a que “saben que se encontrará la verdad en su propia casa, aunque lo quieran negar”.
Señaló que el Ejército, es culpable por acción, pues aseguró que está coludido con la delincuencia organizada; y omisión, debido a que los militares se negaron a auxiliar a los normalistas la noche del 26 de septiembre del año pasado en Iguala.
En este punto, la avanzada no logró impedir que un grupo de manifestantes, algunos de esa comisión, tomara piedras del asfalto y las áreas verdes sobre el bulervar, para lanzarlas hacia la 35 Zona Militar, en donde se observó que por dentro, cerca de 50 militares tomaron equipo antimotín, así como posición para resguardar las instalaciones.
Los manifestantes siguieron marchando hacia el sur de la ciudad y no hubo ningún enfrentamiento con los militares, a quienes calificaron de “cómplices del Estado”.
En el Congreso local, el magisterio disidente expresó su repudio hacia los diputados, bajo el argumento de que “sólo les interesa cobrar su quincena y no es verdad que velen por los intereses del pueblo, ellos aprobaron la reforma educativa, no les importó afectar a las bases trabajadoras”.
El contingente se detuvo unos 5 minutos frente al Congreso local, sólo para manifestar que los diputados no se han pronunciado “como debe de ser” en contra de la desaparición forzada de los 43 normalistas de Ayotzinapa, ni de la reforma.
La marcha avanzó sobre el encauzamiento del río Huacapa hasta el Palacio de Gobierno, en donde colocaron diversas lonas, que contenían las demandas del magisterio disidente, sobre el portón principal, e hicieron un mitin.
Durante el mitin, la CETEG reiteró que no participará en la evaluación del Servicio Profesional Docente y llamó a las bases a mantenerse firmes en contra de la reforma, pues de lo contrario se aplicará un nuevo régimen, bajo el cual se perderán los derechos laborales de los trabajadores de la educación.
También participaron representantes de la CETIG, quienes declararon que la organización la conforman “los verdaderos transportistas”, a quienes el gobierno estatal les negó las conseciones que les corresponden por derecho, y se pronunciaron en respaldo total a los padres de familia de los 43 normalistas desaparecidos, así como del magisterio disidente.
La movilización concluyó poco después de las 3 de la tarde y los cetegistas entraron al Auditorio Sentimientos de la Nación, frente al Palacio de Gobierno, para llevar a cabo una asamblea estatal; mientras estuvo la protesta no se permitió la entrada o salida del edificio.