Afectará la violencia la afluencia de turistas y a los comercios, advierten empresarios

*Pero el presidente de la AHETA, Héctor Pérez, dice que no ha habido cancelación de reservaciones

Mariana Labastida

Mientras los presidentes de la Canaco, Raúl Iracheta Montoya, y de la Concamin, Julián Urióstegui Carbajal, consideraron que la violencia podría afectar la afluencia turística y al sector comercio, el presidente de la AHETA, Héctor Pérez, aseguró que hasta ayer no había bajado el porcentaje de reservaciones y que espera que se mantengan.
De la discusión sobre la legalización de la droga que el gobernador Rogelio Ortega Martínez informó que propondrá, con el objetivo de acabar con la violencia, los dirigentes mencionaron que podría contrarrestar la situación, pero no consideraron que fuera el momento oportuno para ese tema.
Consultado respecto a los hechos violentos que han ocurrido en las últimas semanas en la avenida Costera, en playas y restaurantes, como en el restaurante Buzos ubicado en el fraccionamiento Magallanes, donde hombres armados dispararon contra clientes que se encontraban comiendo y resultando cuatro muertos y dos heridos, el presidente de la Canaco, Raúl Iracheta, dijo que “desgraciadamente se elevó el grado de violencia en el municipio, en plena luz del día y en lugares céntricos concurridos por turistas” están ocurriendo asesinatos.
Señaló que la situación es preocupante para la ciudadanía y los comercios.
Aseguró que los crímenes afectan la imagen de Acapulco, y aunque se sabe que los ataques no son dirigidos a turistas sí pueden asustar a los visitantes.
Raúl Iracheta consideró que la presencia de los gendarmes en la zona turística, que anunció el gobernador, así como de policías federales y estatales ayuda a inhibir, pero “aún así suceden las cosas”, e indicó que faltan sistemas de inteligencia para contrarrestar los hechos de violencia.
Convocó a las policías a no confiarse, a no bajar la guardia, “si se está viviendo esa situación de violencia en la misma playa, no hay ningún lugar a donde no pueda llegar”.
En otro tema, indicó que “nos concierne a todos los ciudadanos el participar en la discusión de la legalización de la droga que anunció el gobernador”, pues recordó que es un tema a nivel mundial, no privativo de Acapulco o México, “y que se debe de analizar a fondo si permitir el consumo o no contrarresta la situación que genera la violencia”.
Por su parte, el presidente de la Concamin, que agrupa cámaras como la de restauranteros, construcción, transformación, vivienda, entre otras, Julián Urióstegui, aseguró que la violencia afecta la percepción que tienen los turistas en el tema de seguridad y principalmente a los ciudadanos.
“Es difícil hacer campaña de promoción turística así, las autoridades deben de atender ese tema de manera integral, hay consternación, parecía que habíamos superado esa etapa pero no fue así, sigue siento importante que las autoridades hagan políticas públicas para que haya efectividad en el tema de seguridad en Acapulco”, expuso.
Urióstegui Carbajal cuestionó el trabajo del gobierno municipal en el sentido de no preocuparse por tener un programa de seguridad que dé resultados. “Acapulco está otra vez suelto en el tema de seguridad, tenemos un presidente interino que sólo está esperando entregar, está a punto de concluir con malos resultados en el tema de seguridad, y el alcalde con licencia, Luis Walton, tampoco respondió a los ciudadanos”.
El empresario constructor consideró que los gendarmes resguardarán la zona turística la blindarán temporalmente, “en el fondo el tema es estructural”.
Consideró que el debate de la legalización de la droga se tiene que dar, que en muchos países se ha avanzado en la polémica, sin embargo “este momento de violencia tal vez no es el mejor para discutirlo, pero seguramente llegará el tiempo de debatirlo desde todos los diferentes puntos de vista”.
Por su parte, el presidente de la AHETA, Héctor Pérez Rivero, aseguró que “hasta ahorita” los hechos violentos que han ocurrido en playa y cerca de la Costera no han afectado la ocupación hotelera.
Indicó que para el fin de semana los hoteles agremiados a esa organización están llenos y que esperan seguir así el resto de la temporada.
Insistió en que no habido inquietud por parte de los visitantes, y del resguardo de los 400 gendarmes dijo que la operación está “bastante bien cubierto y los turistas pueden sentirse seguros”.