Otra vez se canceló la sesión porque sólo fueron a trabajar 18 de los 46 diputados

Rosalba Ramírez García

Chilpancingo

Nuevamente se canceló ayer la sesión del Congreso local por falta de quórum, ya que sólo llegaron 18 de los 46 diputados, y se convocó para el próximo martes a una sesión publica y solemne en la que mandos del Ejército serán “invitados de honor” para develar las letras doradas del nombre del teniente José Azueta.
El jueves 9 de julio pasado tampoco llegaron suficientes diputados, pues sólo acudieron ocho de los 46.
La sesión de ayer estaba convocada para las 11 de la mañana, pero fue hasta minutos antes de las dos de la tarde cuando llegaron al salón de plenos los poquitos legisladores que acudieron a trabajar.
La presidenta de la Mesa Directiva, Laura Arizmendi Campos, pidió que se realizara el pase de lista para confirmar el quórum, y sólo había 18 de los 46 diputados, cuando el mínimo que se necesitan son 24 para que las sesiones sean legales.
En otras ocasiones se ha decretado un receso para convocar a los diputados que están en sus oficinas a que bajen al salón de plenos, incluso han llegado a pasar lista hasta por tres veces en espera de que lleguen los representantes populares, pero ayer no ocurrió, sólo se realizó el pase de lista una vez.
Al determinar que no había quórum, con base en la fracción primera del artículo 30 de la Ley Orgánica del Poder Legislativo se canceló la sesión para convocarla para el próximo martes.
La sesión del martes 21 será publica y solemne, y se develarán las letras doradas del nombre del teniente José Azueta.
La presidenta de la Mesa Directiva pidió a los diputados que fueran “muy puntuales”, porque en la sesión estarán autoridades del Ejército Mexicano y de la Marina, “en consideración… de verdad a que la investidura militar exige puntualidad, nosotros tenemos que corresponderles, recuerden que son nuestros invitados, yo les ruego que seamos puntuales el próximo martes”.
También les pidió que vistieran de traje oscuro para la ceremonia de develación del nombre del teniente José Azueta.
Ayer en el salón del plenos ya habían iniciado los trabajos de reparación de la parte del inmueble incendiada el 12 de noviembre pasado por integrantes del movimiento que exige la presentación con vida de los 43 estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa detenidos y desaparecidos el 26 de septiembre.
La parte de madera que fue incendiada estuvo cubierta con mantas por más de ocho meses, y fue hasta esta semana cuando iniciaron los trabajos de reparación para la sesión publica y solemne en la que mandos del Ejército serán invitados de honor.
En la sesión se iba a presentar la iniciativa de decreto por la que se reforman y adicionan diversas disposiciones de la ley número 1212 de salud del estado.
También se realizaría la primera lectura del dictamen con proyecto de decreto por el que se reforman los artículos 17, fracción IV y 104 de la ley número 696 de la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Guerrero, reformada de manera integral en marzo de este año.
Para discutirse y votarse estaba el proyecto de decreto por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones de la ley número 878 del equilibrio ecológico y la protección al ambiente del estado y se adicionan diversas disposiciones a la ley número 994 de planeación.
También se quedó sin ser abordado el dictamen con proyecto de acuerdo parlamentario por el que el Congreso exhorta al gobernador Rogelio Ortega Martínez a que a través de la Comisión de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento del Estado (Capaseg), se “fortalezcan las acciones” encaminadas a una nueva cultura del cuidado del agua, fomentando el ahorro y el uso racional y eficiente del líquido, así como su preservación y reutilización.