Periódico con noticias de Acapulco y Guerrero

Que se investigue al Ejército, piden padres de Ayotzinapa en Iguala a 10 meses de los ataques

*Marchan unos 100 manifestantes y colocan flores en donde fueron hallados asesinados tres normalistas

Alejandro Guerrero

Iguala

En exigencia de justicia, castigo a los responsables materiales e intelectuales, presentación con vida de los detenidos-desaparecidos y que se investigue a los soldados del 27 Batallón de Infantería, a 10 meses del ataque y desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, la tarde de ayer padres de familia y organizaciones que los acompañan marcharon y colocaron ofrendas florales en los puntos en los que se encontró asesinados a tres normalistas la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre.
Después de las 5 de la tarde los padres de los 43 normalistas detenidos-desaparecidos en esta ciudad por policías municipales y miembros de la delincuencia, llegaron a la carpa de la explanada de Las Tres Garantías, donde maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) de la zona Norte e integrantes del Bloque de Organizaciones y ciudadanos de Iguala les ofrecieron una comida.
A las 6:30 de la tarde salieron en marcha desde la explanada sobre la avenida Juan Álvarez hasta el cruce con el periférico Norte, la ruta fue llamada por los padres como “la ruta de la muerte” porque este camino siguieron los tres autobuses con normalistas la noche del 26 de septiembre, cuando eran perseguidos por policías municipales de Iguala que les disparaban. A los jóvenes los emboscaron en la última cuadra de esta avenida antes de llegar al periférico, ahí les dispararon, los hirieron, los detuvieron y a 43 los desaparecieron.
Mediante un aparato de sonido el representante de los padres de los 43 desaparecidos, Melitón Ortega y el abogado Vidulfo Rosales Sierra informaron que la marcha no era en contra de los ciudadanos, sino en contra de las corporaciones policiacas municipal, estatal y federal.
También exigieron que el Ejército sea investigado por su responsabilidad, complicidad u omisión en los ataques, pues no prestaron apoyo a los estudiantes que eran atacados a balazos por los policías.
Melitón Ortega criticó que los soldados del Ejército no acudieran la noche del 26 de setiembre “para frenar el ataque en contra de los normalistas y de los civiles, que fueron asesinados, y por qué no cerraron las principales entradas y salidas de la ciudad para evitar que los jóvenes fueron sacados y desaparecidos la noche y la madrugada del 26 y 27 de septiembre, pero sí lo hacen para impedir el paso de las organizaciones y de los padres de los normalistas”.
Exigió que se investigue al Ejército, a la Policía Municipal y a la Federal, “que son los principales responsables de la desaparición de los jóvenes”.
En la colocación de la ofrenda frente a las cruces de los estudiantes Daniel Solís Gallardo y Julio César Nava, ejecutados en el segundo ataque la madrugada del 27 de septiembre, el vocero de los padres Felipe de la Cruz dijo que están como en el primer día, en exigencia de que el gobierno mexicano dé una respuesta de lo ocurrido esa noche trágica, “y nos presente con vida a los jóvenes que el Estado desapareció en Iguala”.
A 10 meses de los ataques recordó la recomendación que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) al Estado mexicano, para que se abran las investigaciones del caso porque hay muchas inconsistencias, “y no pueden cerrar un caso cuando los asesinos materiales andan sueltos, nos falta Felipe Flores, nos falta el Cabo Gil y otros personajes que se mencionan”, como participantes del crimen, expuso.
A pregunta hecha insistió en que el gobierno mexicano abra el cuartel militar para que se investigue y se entreviste a los soldados, “que no nos abran las puestas a nosotros, pero sí a los compañeros del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), auspiciados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), porque están haciendo su trabajo, que les den facilidades para que hagan las investigaciones y lleguemos a la verdad, que es la exigencia el día de hoy hasta que lo abran”.

468 ad