Ejecutan en Atenango del Río a El Diablito, de 17 años, presunto responsable de al menos tres asesinatos

Alejandro Guerrero

Iguala

Hombres armados ejecutaron la tarde de este lunes, después de una persecución a balazos en calles de la cabecera municipal de Atenango del Río, a un joven de 17 años identificado como El Diablito, presunto responsable de al menos tres ejecuciones en Atenango e Iguala.
Entre los crímenes que se le atribuyen en Iguala está el ataque al auto lavado El Peque, el 29 de abril, donde ejecutó al empresario argentino y contratista de la minera Media Luna, Gustavo Alejandro Gómez de 50 años, cuando también dos lavacarros resultaron heridos.
Fuentes policiacas informaron ayer que, cerca de las 6 de la tarde del lunes fue hallado el cuerpo de un joven ejecutado a balazos con un rifle AK-47, conocido como cuerno de chivo.
El cuerpo fue hallado junto al corral de toros de la cabecera municipal de Atenango del Río, de donde era vecino. Fue identificado por sus familiares y se confirmó que se trataba de El Diablito, de 17 años, a quien se le responsabilizó en mayo pasado de al menos tres ejecuciones.
Según testigos, hombres a bordo de una camioneta persiguieron a El Diablito, que iba en una motocicleta, por varias calles de Atenango, disparándole con rifles de alto poder, hasta que le dieron alcance y lo ejecutaron de al menos cuatro balazos.
Cerca del cuerpo y en las calles en las que fue la persecución, las policías federal, estatal y ministerial hallaron varios casquillos percutidos para cuerno de chivo.
El lunes, después de las diligencias, el cuerpo fue trasladado al Servicio Médico Forense (Semefo) de Iguala.
El 23 de mayo, se informó que policías ministeriales y estatales habían capturado a El Diablito, al que responsabilizaban de al menos tres ejecuciones, delitos por los que fue enviado al tutelar de menores, pero meses después fue puesto en libertad.
Según los reportes policiacos, el joven sicario cobraba 15 mil pesos por cada ejecución, y el día de su detención pretendía asesinar a una víctima más.