Cumplen vecinos cuatro días de bloqueo a la carretera en Marquelia en demanda de nuevos municipios

Automovilistas y pasajeros que transitan por la carretera federal Acapulco-Pinotepa Nacional esperan hasta ocho horas bajo un intenso sol para poder cruzar

Jacob Morales Antonio

Marquelia

Automovilistas y pasajeros que transitan la carretera federal Acapulco-Pinotepa Nacional en Marquelia, esperan hasta ocho horas bajo un intenso sol para poder cruzar, debido al bloqueo intermitente que mantienen pobladores de San Nicolás que solicitan al Congreso separarse de Cuajinicuilapa y formar un nuevo municipio.
Los inconformes son acompañados por representaciones de las comunidades de Las Vigas, San Marcos, Temalacatzingo, Olinalá y Santa Cruz del Rincón en Malinaltepec, que exigen la creación de cuatro nuevos municipios. Desde el martes mantienen bloqueada la carretera de forma intermitente en el puente, ese día la bloquearon cinco horas y media.
Ayer los manifestantes advirtieron que el lunes cerrarán de manera indefinida la carretera, si los diputados locales no les conceden la creación de sus municipios. Ese día inician las actividades escolares.
Mencionaron que el gobernador Rogelio Ortega Martínez se comprometió a platicar con los diputados, a través del secretario general de Gobierno, David Cienfuegos.
En el bloqueo había unas 200 personas distribuidas en ambas partes del puente, algunos buscaron sombra y otros se fueron a comer, según sus compañeros apostados bajo una lona azul que los protegía del sol. En sus manos llevaban palos y en el pavimento colocaron piedras para impedir el tránsito.
En declaraciones, el comisario municipal de San Nicolás, Paulo Domínguez Ávila dijo que son unos 8 mil habitantes de 11 poblados los que serían beneficiados con la creación del nuevo municipio. Indicó que el abandono del gobierno a San Nicolás se demuestra en sus calles que ni siquiera están pavimentadas.
El bloqueo duró cuatro horas, y cada 15 minutos se permitió el paso a los automovilistas, se vieron largas filas de automóviles como tráilers, camiones de volteo, taxis, autobuses de pasajeros, de empresas de refrescos, de cervezas y lácteos, la fila iba de la comunidad de Islatepec hasta el puente del Marquelia, rumbo a Ometepec.
El automovilista Julián Cruz Hernández, quien informó que iba a Oaxaca, dijo que tenía unas ocho horas en la carretera, su automóvil quedó a cinco carros de cruzar el puente en el segundo bloque de 15 minutos de paso que se dio en la mañana.
Algunos de los niños que se encuentran atrapados en el tráfico lloran, conductores de tráilers y camiones ante el sofocante calor descansaron en el pavimento, debajo de los camiones donde la sombra refresca.
La molestia no es contra los activistas que bloquean la carretera y exigen las creación de sus municipios, las expresiones entre la gente que camina en la carretera son de reproche y molestia hacia el gobierno, “que les resuelva el gobierno de una vez” manifestó Cruz Hernández, al tiempo que otro joven que lo acompañaba dijo “así son una vez en el poder, se olvidan de la gente”.
Algunos automovilistas y sus familias permanecieron pacientes dentro de sus automóviles con el aire acondicionado encendido, unos duermen y otros escuchan música para entretenerse.
Algunos usuarios del transporte público caminaron unos 500 metros desde el puente y siguieron su camino a Ometepec, después de transbordar, y lo mismo pasó en dirección hacia Acapulco.
En el lugar la señora Delfina Rodríguez vende agua de sandía en cinco pesos a la gente atrapada bajo el calor que quema hasta la sombra. Otras lugareñas han improvisado bajo los árboles sus fogones y venden comida, un alivio para los pasajeros que se encuentran en la carretera, y que deja algo de dinero para ellas, “el bloqueo tienen sus beneficios” dijo doña Delfina sonriendo.