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Toman egresados de Ayotzinapa oficina de la SEG y la caseta; piden convocatoria para 121 plazas

*De la plaza de cobro de Palo Blanco se retiran 100 normalistas ante la presencia de 500 antimotines federales que amenazaron con desalojarlos. Los jóvenes exigen que cesen los actos represivos, pues saben que hay 15 averiguaciones previas contra ellos

Carlos Navarrete Romero

Chilpancingo

Egresados de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa tomaron la sede alterna de la Dirección de Administración de Personal, de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), durante más de 11 horas y la caseta de cobro de Palo Blanco, en exigencia de que se cumpla el acuerdo con el gobierno federal, para que en septiembre se emita una convocatoria extraordinaria y puedan concursar por 121 plazas.
También exigieron que cesen los actos represivos de las autoridades estatales en contra de ellos, toda vez que tienen conocimiento de que hay 15 averiguaciones previas por el respaldo que han dado a los padres de los 43 normalistas, desaparecidos en Iguala en septiembre pasado.
A las 10 de la mañana, poco menos de cien egresados de la Normal, de la generación 2011-2015, llegaron a bordo de dos autobuses a la caseta de peaje, que se encuentra sobre la Autopista del Sol, a 15 minutos de la capital.
Ahí los jóvenes, que llevaban los rostros cubiertos, pidieron cooperación a los automovilistas, a quienes les permitían el paso y solamente requerían de un pago voluntario, es decir, no lo condicionaban por una cuota específica.
Media hora después, se trasladaron hasta ese lugar más de 500 policías federales con equipo antimotines.
Uno de los uniformados se acercó a los jóvenes, a quienes les pidió que se retiraran, o de lo contrario iniciaría el desalojo. Los egresados no hicieron caso a la advertencia y permanecieron en el lugar.
Ante la negativa, se dio la orden para que los policías se colocaran en los nueve módulos de la caseta, justo donde estaban los jóvenes pidiendo la cooperación. Los líderes de la movilización llamaron a sus compañeros a no confrontar a los uniformados, quienes se limitaron a colocarse en las aceras de la caseta para evitar que los egresados continuaran con su colecta.
Al verse rebasados en número, los inconformes se retiraron y abordaron sus autobuses para regresar a Chilpancingo. En ese momento inició el rumor de que se dirigían a Tierra Prietas, donde se encuentra el hospital general Raymundo Abarca Alarcón, para continuar con la colecta.
Por tal razón, los más de 500 policías federales también abordaron sus unidades y se dirigieron al punto en el que presuntamente se instalarían los jóvenes egresados, sin embargo, al llegar a ese punto se percataron de que no había ninguna movilización, y regresaron a su base, que se encuentra en el helipuerto de la ciudad.
Luego de abandonar la caseta, cerca de las 11:30 de la mañana, los inconformes se dirigieron a la sede alterna de la Dirección de Administración de Personal de la SEG, que se localiza en la colonia 20 de Noviembre, a una cuadra de donde se encuentra la Junta Distrital 07, del Instituto Nacional Electoral (INE).
Al llegar, los egresados de Ayotzinapa pidieron a los poco más de 60 trabajadores que tomaran sus pertenencias y abandonaran el edificio, y en menos de 15 minutos el lugar ya había sido evacuado.
Los egresados ingresaron al inmueble y se quedaron ahí. Ante esta situación, un camión con cerca de 50 policías estatales, con equipo antimotines, llegaron y permanecieron a una cuadra del lugar, esperando la orden para desalojar, sin embargo ésta no se dio, incluso los uniformados se retiraron poco antes de la 1:30 de la tarde.

La demanda

Uno de los egresados explicó que existe un acuerdo con el gobierno federal, para que en septiembre se emita una convocatoria extraordinaria y los 121 egresados de Ayotzinapa puedan concursar por igual número de plazas, que serán liberadas por jubilación.
Comentó que las autoridades les explicaron que por jubilación este año serían liberadas 600 plazas en total, y existe la capacidad de atender la demanda de los recién egresados.
Dijo que el acuerdo se firmó con Ramiro Álvarez Retana, coordinador nacional del Servicio Profesional Docente, y se establece que en septiembre se emitiría una convocatoria extraordinaria, para que los 121 egresados de Ayotzinapa de la licenciatura en educación primaria y educación física concursen por una plaza.
“A pesar de ese acuerdo que tenemos con el licenciado Ramiro Álvarez, en el estado de Guerrero hay funcionarios que están obstaculizando ese proceso, ese acuerdo, no quieren que esa convocatoria salga en septiembre y lo quieren prolongar hasta enero”.
Acusó a Joaquín García Mondragón, director general de Administración de Personal, de estar retrasando los procesos de jubilación, a fin de que la convocatoria no se emita hasta enero del próximo año, es decir, ya que Héctor Astudillo Flores haya asumido el cargo como gobernador.
Dijo que otra de las demandas es que les impartan cursos presenciales, a fin de que los 121 egresados lleguen preparados al examen de oposición, que les estarían aplicando en septiembre, si es que se respeta el acuerdo con el gobierno federal.
Recordó que el año pasado los cursos fueron virtuales, es decir, las guías de estudio y otras herramientas eran facilitadas vía internet, “nosotros lo que queremos es que se fortalezca nuestra capacidad, con cursos presenciales, eso es lo factible”.
Otro normalista denunció que tienen conocimiento de que existen 15 averiguaciones previas en contra de normalistas egresados de Ayotzinapa, por el respaldo que han dado a los padres de los 43 estudiantes desaparecidos en Iguala.
Aseguró que se trata de un acto represivo por parte del gobierno del estado, por lo que exigió que cese ese hostigamiento y se retiren las averiguaciones previas.
Mientras los egresados se manifestaban en la capital estatal, en la ciudad de México el subsecretario de Educación Media Superior y Superior, Javier Casiano Reachi, y el director de la Normal de Ayotzinapa, José Luis Hernández Rivera, tenían un encuentro con representantes de la Dirección General de Educación Superior para Profesionales de la Educación (DGESPE).
En esa reunión se plantearía la exigencia de los egresados, por lo que los inconformes anunciaron que no liberarían las instalaciones de la SEG, hasta que les informaran los acuerdos de esa reunión.
Hasta las 10 de la noche, los egresados continuaban en las instalaciones de la Dirección Administración de Personal de la SEG y no habían recibido información de los acuerdos de la reunión en la ciudad de México, por lo que se hablaba de la posibilidad de que pasaran la noche ahí.

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