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Temen vecinos del Cerrito La Laguna, en San Isidro, que los desalojen de un predio en disputa

Responsabilizan a la ex comisaria ejidal María de los Ángeles Ramírez Montejo y a la actual, Calixta Zequeira, de lo que les llegara a ocurrir

 

Abel Salgado

Vecinos del Cerrito La Laguna, en la colonia San Isidro, al poniente de Acapulco, se dijeron preocupados por el intento del desalojo por parte del gobierno estatal que el jueves envío a policías estatales para intimidarlos.
Contaron que en días anteriores personas armadas han tomado fotografías al lugar y se retiran rápidamente.
En conferencia de prensa en el restaurante Rossmar de la avenida Costera, uno de los representantes, Baltazar Benavides Robles, señaló que la ex comisaria ejidal María de los Ángeles Ramírez Montejo manipuló a través de ejidatarios para reactivar el juicio para despojarlos del predio que lleva 14 años en disputa en el Tribunal Unitario Agrario.
Benavides Robles dijo que son más de 300 familias que viven en el predio.
Después de que policías estatales se colocaran en los alrededores del predio el jueves, temen que un eventual desalojo se lleve a cabo de forma violenta cuando en el lugar hay niños, mujeres embarazadas y adultos mayores.
Consideró injusto que traten de consumarse acciones como las del jueves, porque no les han enviado notificaciones “llegan el día de ayer (jueves) a las 10 de la mañana y como  ahí estamos habitando, inmediatamente nos organizamos, tratamos de impedir que se diera eso”.
Indicó que ese predio está en conflicto con la comisaría ejidal de Pie de la Cuesta. Precisó que las tierras no las compraron “indebidamente” porque llegaron hace 14 años por invitación del finado dueño José Terán. Recordó que José Terán, inició un juicio en 1995 contra el comisariado ejidal.
Por su parte, Ángel Emanuel Terán Rendón, indicó que en ese entonces el comisariado ejidal era presidido por María de los Ángeles Ramírez Montejo, quien manifestó que las 11 hectáreas que comprende la propiedad, supuestamente son de “uso de tierra común”.
Emanuel Terán, indicó que Ramírez Montejo ha manipulado el ejido incluso a través de otros comisariados ejidales. Señaló que la actual comisariada ejidal, Calixta Zequeida, es del grupo de María de los Ángeles, además de que no cumplió con el protocolo para su elección “simplemente fue una imposición”.
Terán Rendón informó que el predio de 11 hectáreas está en juicio, de lo último que tenían conocimiento es que Ramírez Montejo ha usado “arbitrariamente”, acciones legales para que ellos no fueran notificados personalmente sino a través del estrado.
Llamó a la magistrada del Tribunal Unitario Agrario del distrito 41 para que analice su situación legal. Emanuel Terán responsabilizó a la magistrada de la cual no recordó el nombre de “cualquier hecho violento, de cualquier persona herida nosotros la responsabilizamos a ella porque se puede poner más pacífica a un diálogo más tranquilo y llegar a un acuerdo”.
Manifestó que éste era el segundo intento de desalojo por parte de las autoridades estatales. Pidió a las autoridades municipales y estatales que intervengan.
Emanuel Terán dijo que Ángeles Ramírez pretende vender ese predio de 11 hectáreas  para comercializarlo.
Reportó que la semana pasada gente armada  se bajó de las camionetas, se metieron a los predios a tomar fotografías sin dar razón de su visita “cuando las personas se daban cuenta y se acercaban, emprendían la retirada acelerada”. Dijo que la población temía de su integridad porque hay mujeres, niños y adultos mayores.
Baltazar Benavides precisó desde hace 15 días, han acudido consecutivamente las personas armadas, lo interpretaban como un acoso del comisariado porque ha visto que esas camionetas llegan a las oficinas del comisariado. También señaló a la comisaria ejidal, Calixta Zequeira, de lo que les llegara a ocurrir; reiteró que temían por sus vidas.
Puntualizó que llevarán a cabo una “resistencia pacífica”, y que evitarán que entre cualquier autoridad con la intención de desalojarlos.
Ángel Terán dijo el jueves que una persona que se ostentó como representante de la Comisión Estatal de Derechos Humanos entró al predio. Ya en el interior, los vecinos escucharon cuando esta persona alzó el teléfono e indicó “ya pueden proceder, son menos de 100”, hecho que les hizo dudar de su presunta representación.

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