Va Ortega a la asamblea del Cecop y le exigen la libertad de luchadores sociales encarcelados

“Nos faltan María de la Cruz Dorantes, Nestora Salgado y los demás presos políticos”, le dice Marco Antonio Suástegui al gobernador durante el festejo por el aniversario número 12 del movimiento, al que acudió como invitado. “Guerrero ya no aguanta más, estamos a punto del estallido social y si los gobiernos piensan que con reprimir, encarcelar, desaparecer y asesinar van a doblegar a Guerrero están equivocados”, advierte el vocero de los opositores a la presa La Parota

Mariana Labastida

Durante la conmemoración del aniversario número 12 del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a La Parota (Cecop), el vocero Marco Antonio Suástegui pidió ante el gobernador Rogelio Ortega Martínez la liberación de la comunera María de la Cruz Dorantes Zamora y de los integrantes de la CRAC.
Allí el gobernador, que asistió como invitado, se comprometió con los hijos de María de la Cruz Dorantes a que su madre pronto estará con ellos y nuevamente llamó a los diputados a aprobar la ley de Amnistía, con la cual, dijo, se puede lograr la libertad de los integrantes de la CRAC.
El aniversario 12 del Cecop fue el pasado 28 de julio, pero se festejó ayer y se realizó en la cancha techada de la comunidad de La Concepción, donde se encuentra el retén para impedir el paso a los camiones de la gravillera Kimbar, de Humberto Marín, y la casa muestra de la CFE, utilizada como comandancia de la Policía Comunitaria de los Bienes Comunales de Cacahuatepec. Asistieron unas 300 personas.
A diferencia de los festejos de los 11 años anteriores, en esta ocasión el invitado especial, además de las diferentes organizaciones sociales y familiares de los presos políticos, fue el gobernador Rogelio Ortega, quien llevó 500 sombreros que ofreció en su visita anterior en la comunidad de Salsipuedes.
“No hay qué celebrar, nos faltan María de la Cruz, Nestora y los demás presos políticos”, le recordó Suástegui Muñoz al gobernador al recibirlo casi frente a la cancha, a quien le dio la bienvenida y que “estaba en su casa” para que terminara la última etapa de su periodo bien.
Al llegar al templete, que fue colocado en la cancha y donde se encontraba un representante de cada organización y a los que se sumaron después familiares de la coordinadora de la CRAC, Nestora Salgado, la gente comenzó a gritarle consignas al gobernador: “Libertad, libertad a los presos por luchar, porque luchan por su tierra, por eso los encierran”; “María presa y presa La Parota”; “Vivos se los llevaron, vivos los queremos”, “Ayotzi vive, la lucha sigue”.
Mientras que los hijos y el esposo de María de la Cruz Dorantes se colocaron frente al templete con cartulinas y una manta solicitando al gobernador la libertad de la comunera.
El gobernador llegó acompañado por el secretario general de Gobierno, David Cienfuegos Salgado, y el director de la Promotora Turística, Miguel García Maldonado, así como otros funcionarios, y todos se quedaron entre la gente cerca del templete.
En su intervención, Marco Antonio Suástegui pidió al gobernador que los ayude a sacar de la cárcel a los presos políticos, “sólo pensar en ellos me llena de rabia, tristeza y dolor”.
“Apelo, te pido y te exijo que pongas esa buena voluntad para que estén nuestros compañeros de regreso”, y explicó que sabe que toda acción política-social va acompañada de una acción legal.
“Hombre bueno, te pido que nos ayudes a sacar a María de la Cruz, que nos ayudes a sacar a Nestora, que venga esa mujer buena también, la gran comandanta, libre con su pueblo, a Gonzalo y a Arturo por supuesto, luchadores incansables, y a los demás guardias comunitarios, que todo lo que está en tus manos, gobernador, lo hagas, yo sé que se puede aportar algo”
Suástegui Muñoz expuso que los gobernantes deben de entender que a Guerrero no se le amenaza con macana, leñazos o se le acribilla con balas, sino que se deben construir acuerdos. “Se trata de echarle humildad porque Guerrero ya no aguanta más, estamos a punto del estallido social y si los gobiernos piensan que con reprimir, encarcelar, desaparecer y asesinar van a doblegar a Guerrero están equivocados”.
Puntualizó que los gobernantes y gobernados deben de tener comunicación constante. “No queremos gobierno represores ni sangrientos, sabemos que los gobiernos del PRI por naturaleza son asesinos, cobardes, traidores y por eso tenemos que estar unidos para cerrarle el paso a la impunidad y la violencia, que le quede claro y este es un mensaje para Héctor Astudillo Flores, que aquí su gobierno represor y que esa supuesta mano dura que quiere poner no la vamos a permitir. Que se olvide de la presa La Parota, de andar encarcelando gente, de andar asesinando porque la mirada internacional, nacional y local están puestas sobre Guerrero, pero si los gobiernos del PRI nos declaran la guerra guerra van a tener”.
Agregó que fue detenido y torturado, sin embargo “jamás nos van a rendir, jamás vamos a claudicar”.
También solicitó al gobernador que por medio del desistimiento se puedan cancelar algunas de las 60 averiguaciones previas que tienen integrantes del Cecop por denuncias puestas por el gobierno del estado, así como que en el último tramo de su administración promueva la paz y el desarrollo en las comunidades de los Bienes Comunales.
El sobrino de Nestora Salgado, Giovanni Torres Salgado, le recordó al gobernador que cuando liberaron el Ayuntamiento de Olinalá se comprometió a que antes de que terminara su gobierno estarían la comandanta y los integrantes de la CRAC en sus comunidades.
Y la hermana de Nestora, Cleotilde Salgado, dijo que espera que también ellos estén festejando ante sus compañeros la libertad de Salgado García.

Mi compromiso es liberar a los luchadores sociales, dice el gobernador

En tu intervención, Rogelio Ortega prometió a los hijos de la opositora María de la Cruz Dorantes que también quedará en libertad. “Aquí vamos a traer a su mamá, a María de la Cruz, nos comprometemos y lo vamos a lograr”.
Al escuchar el compromiso del gobernador, Marco Antonio Suástegui se levantó de su silla y gritó: “María vive, la lucha sigue” y fue secundado por los asistentes.
Ortega Martínez pidió un aplauso para los familiares de Nestora Salgado, y aseguró que él mismo llegará hasta el penal de Tepepan, donde se encuentra recluida y en ayuno por los normalistas desaparecidos, “que sepa que somos solidarios”.
Los opositores gritaron: “Nestora aguanta, el pueblo se levanta”.
El gobernador expuso que se siente comprometido con los luchadores sociales, y por eso ofreció dedicar cada minuto de lo que queda de su gobierno y toda su energía para lograr que obtengan su libertad; “es nuestro compromiso ahora y lo seguirá siendo”. Que después estará marchando con todas las organizaciones sociales en unidad y exigiendo que llegue el desarrollo a los pueblos de Guerrero.
Recordó que el compromiso de abonar para la libertad de los presos políticos fue en tres direcciones: la aceleración del debido proceso, la posibilidad del desistimiento y la ley de amnistía, “con la cual las y los luchadores sociales obtendrían de inmediato su libertad”.
Mencionó que no solamente los luchadores emblemáticos. sino de todos los que están en prisión.
Rogelio Ortega solicitó “desde aquí y cualquier lugar que hemos estado levantar nuestra voz de justicia, que llegue a los oídos y retumbe en el palacio legislativo de Guerrero para que los diputados y diputadas antes de que se vayan puedan aprobar la ley de amnistía como un acto de justicia para Guerrero”.
El gobernador reiteró que sólo la justicia y la aplicación de la ley será como se cauterice la herida que provocó lo ocurrido en Iguala con los normalistas de Ayotzinapa, y que el reclamo es justo de la aparición con vida de los estudiantes.
Ortega Martínez dijo sentirse “satisfecho y contento” porque cumplió con lo que ofreció en su visita a Salsipuedes, donde aseguró que Marco Antonio Suástegui saldría de la prisión, que era un gran disfrute para él y por eso era un día de celebración.
“Que llegue la inversión pero no para saquear, sino para que salgamos de la pobreza, del atraso y el rezago”, subrayó al referirse al proyecto de la presa La Parota.
Ortega Martínez enfatizó que ya llegó el día en que el agua es más cara que el petróleo, por eso convocó a que se proteja arriba, en la sierra, y se defienda abajo el caudal del río Papagayo.
Expuso que sin agua no hay vida y que llenar el embalse de la presa llevaría por lo menos siete años, lo que acabaría con todo lo que este junto al río.
Resaltó que a veces los proyectos atropellan los intereses de los pueblos y por eso viene la lucha de resistencia y la oposición a lo que pareciera la modernización y desarrollo, y consideró que deben de trabajar en armonía pueblo y gobierno.
“Aquí estamos en la pobreza y la marginación, tan cerquita de Acapulco”, manifestó el gobernador, e indicó que que se tiene que hacer justicia y llegar el desarrollo, “por eso estamos aquí siendo solidarios con un luchador social”.
Antes de la llegada del gobernador, el asesor del Cecop, Rodolfo Chávez, recordó a los asistentes que en los 12 años de lucha se ha suspendido la construcción de la presa, pero que no se la logrado la cancelación definitiva.
El vocero del Cecop se dirigió a los asistentes y les preguntó si detendrían su lucha contra las gravilleras, y todos votaron por un no, sino que continurán con la defensa del río y las tierras.
Asimismo hizo un pase de lista por los compañeros que han muerto y a las organizaciones y vecinos que asistieron.
Suástegui Muñoz recordó el hermanamiento del Cecop con la normal de Ayotzinapa, por lo que enfatizó que “ni un paso atrás” en la lucha por la aparición de los estudiantes y justicia para los que han muerto.
Convocó “a dejar el miedo atrás y a la unidad de todos los movimientos sociales, para que en conjuntoo se pueda exigir la liberación de los presos políticos y contra las reformas estructurales aprobadas, como la educativa”.
Las organizaciones asistentes en sus breves intervenciones apoyaron la convocatoria de unificar las luchas, de no ir solos en ningún momento; al aniversario asistieron integrantes de la CETEG, del Sutcobach, Cetig, del Movimiento de Afectados pro las Presas de Brasil, CRAC-Olinalá, Colores y el Comité Nacional de Presos Políticos.