No menciona en su informe el alcalde de Iguala el caso de los normalistas de Ayotzinapa

Alejandro Guerrero

Iguala

Sin mencionar el ataque y desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, hecho por el que llegó a ser alcalde interino de Iguala, Silviano Mendiola Pérez rindió ayer su informe de labores ante un reducido número de amigos y ciudadanos de este municipio.
El informe de actividades se realizó después de las siete de la noche en el auditorio del palacio municipal, con la presencia de no más de 300 personas, principalmente funcionarios, representantes de cámaras de comercio, de la barra de abogados, del sector salud, empleados del ayuntamiento y algunos habitantes de colonias que fueron enviados a la parte más alejada del auditorio que no logró llenarse, por lo que fue necesario retirar más de 50 sillas que habían sido colocadas en el patio y que quedaron vacías.
Para el informe de actividades se desplegó un cerco de seguridad en el que participaron efectivos de la policía del estado y federales de la Gendarmería Nacional, que cerraron las calles Vicente Guerrero y Bandera Nacional, que son paralelas a la sede del Ayuntamiento, y dentro del edificio fueron desplegados unos 30 efectivos estatales con equipo antimotines para actuar en caso de alguna manifestación.
Se mostró un video de las obras realizadas por el gobierno municipal, que duró 20 minutos; cuatro de esos minutos en agradecimientos al alcalde, que fueron filmados a ciudadanos, y posteriormente el alcalde dio lectura a su discurso de 11 cuartillas en el que destacó las obras y acciones realizadas del 11 de noviembre a septiembre, en el que habló de una inversión de 112 millones de pesos para la ejecución de 149 obras.
En ningún momento Mendiola Pérez se refirió al caso de los normalistas de Ayotzinapa atacados y desaparecidos en esta ciudad hace ya casi un año, y que fue el motivo de la separación del cargo y detención del ex alcalde José Luis Abarca Velázquez, y por el que llegó al cargo como alcalde interino.
Tampoco habló del brote de violencia y la escalada de inseguridad durante el tiempo que lleva gobernando y que dejó cerca de 100 ejecutados en un año.
No habló del alto número de robos y asaltos a mano armada que se perpetraron en pleno centro de la ciudad y menos de las más de 300 víctimas de desaparición forzada de Iguala registrados ante el comité de victimas de desaparición forzada Los Otros Desaparecidos, que surgieron luego del caso Ayotzinapa en noviembre, casi al tiempo que él asumió el cargo.
Sólo al término del acto el gobernador Rogelio Ortega Martínez hizo referencia a la desaparición de los normalistas que puso a Iguala y el estado de Guerrero ante los ojos del mundo.
“Estamos aquí, en Iguala, que le tocó enfrentar una de las tragedias más graves que ha enfrentado el pueblo de Guerrero por lo menos en los últimos 100 años, por eso en cualquier espacio de la agenda gubernativa teníamos que dejar de lado otras actividades para estar aquí con ustedes, el pueblo de Iguala”, dijo.
Señaló que la tragedia de Iguala “convocó” a Silviano Mendiola para encabezar la alcaldía de Iguala y a él la gubernatura de Guerrero, “por una tragedia que trascendió más allá de las fronteras y que abrió una herida que aún no sana, en la que se agravió a un conjunto de la sociedad guerrerense en aquella trágica noche del 26 y 27 de septiembre del año pasado, en la que perdieron la vida seis personas, más de 30 heridos y los 43 jóvenes de Ayotzinapa desaparecidos, lo que hizo que empezara otra historia para Guerrero”.
Dijo que tanto él como Mendiola Pérez salieron de su zona de confort, “él de la magistratura y yo de la secretaría general de la universidad, como bateadores emergentes, creo que salvamos el partido”.
Ortega Martínez recordó el fallo a favor del gobernador electo Héctor Astudillo Flores y dio que “hay que apoyar a Héctor Astudillo para que le vaya bien a Guerrero, la elección ya pasó, ahora a trabajar para recomponer el tejido social, para seguir construyendo armonía y paz, y sobre todo para el desarrollo del estado de Guerrero”.
Al informe asistió el alcalde electo de Iguala, el priista Esteban Albarrán Mendoza, el alcalde panista de Tepecoacuilco, Antonio Galarza Zavaleta, el secretario general de Gobierno, David Cienfuegos Salgado, el magistrado Julio Lorenzo Jáuregui, en representación de la presidenta del TSJ, Lambertina Galeana, y miembros del cabildo.