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Salen de Juchitán comunitarios de la CRAC afín a Eliseo Villar; los vecinos denuncian abusos

*Tres patrullas del Ejército llegaron a la Casa de Justicia que antes había sido abandonada, dijeron testigos

Jacob Morales Antonio y María Avilez Rodríguez

Juchitán / Chilpancingo

Policías comunitarios de la Casa de Justicia de Juchitán, de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC), por acuerdo de los habitantes salieron de la cabecera; mientras que en Chilpancingo, el abogado de la Coordinadora Nacional Plan de Ayala (CNPA), Héctor Muñoz Guzmán denunció hostigamiento de los militares.
Ayer, tres patrullas del Ejército llegaron a la Casa de Justicia ubicada a las afueras de la cabecera municipal, pero el lugar había sido abandonado desde el martes; algunas pertenencias de los comunitarios seguían en el lugar, informaron los vecinos.
Los vecinos indicaron que ayer, antes de que llegaran los militares alrededor de las 11 de la mañana, los comunitarios fueron a sacar algunas pertenencias y se llevaron a 6 o 7 detenidos que tenían en el lugar, pero desconocen a dónde los trasladaron.
El domingo y el lunes, en asambleas en el Zócalo de Juchitán, los vecinos se quejaron de abusos de los integrantes de la CRAC afín a Eliseo Villar Castillo, preso desde el 30 de abril, primero en Veracruz y luego trasladado al penal de Acapulco, acusado de privación ilegal de la libertad.
Los propios vecinos reconocieron que desde la llegada de la CRAC al municipio, a finales de 2014, la delincuencia ha disminuido y hay mayor confianza a salir por las noches. Pero mantenían una distancia con el grupo de seguridad.
Los pobladores manifestaron que cuando la comunitaria llegó a Juchitán la apoyaban con comida y cooperaciones para la gasolina de los recorridos. Pero dejaron de apoyarlos porque, quienes estaban al frente no eran originarios del municipio.
En la asamblea, según señalaron vecinos que no quisieron dar sus nombres, el coordinador Fructuoso Sánchez Cruz acusó al coordinador Cohimbre Soriano Martínez de irregularidades en la Casa de Justicia y de obtener beneficios personales.
La Casa de Justicia de Juchitán comenzó a operar a finales de 2014 bajo el mando de Villar Castillo. El 30 de abril, seis comunitarios fueron asesinados por policías estatales, según testigos. Ahí también dos policías estatales perdieron la vida.
La organización mantiene presencia en comunidades de Xochistlahuaca, Tlacoachistlahuaca, Ometepec, Cuajinicuilapa, Igualapa y Marquelia. El coordinador Sánchez Cruz no respondió llamadas para responder a preguntas de este reportero.

Hostigan militares a policías comunitarios, denuncia la CNPA

El abogado de la Coordinadora Nacional Plan de Ayala (CNPA), Héctor Muñoz Guzmán denunció que después de reunirse con el gobernar del estado, Rogelio Ortega Martínez, los policías comunitarios de la CRAC son hostigados por el Ejército, que este martes expulsó a sus compañeros de la Casa de Justicia de Juchitán.
Además, informó que la estrategia que implementa el gobierno del estado es tratar de dividir a los policías de la CRAC.
En conferencia de prensa en el restaurante El Toronjil, Muñoz Guzmán manifestó que el martes se reunió con los coordinadores de la CRAC-PC, Eliseo Villar Castillo y Adelaida Hernández Nava para preguntarles sobre la postura que asume el gobierno del estado.
Dijo que Villar Castillo le externó que, cuando fue capturado lo golpearon y lo torturaron para que declarara lo que las autoridades querían a su favor, sin embargo se resistió por lo que fue “brutalmente torturado”.
El abogado comentó que, la semana pasada se reunió con Ortega Martínez, quien le propuso que las policías comunitarias se regularicen, pero no aceptaron. “Después de la reunión observamos que se el gobierno realiza acciones de hostigamiento en contra de los integrantes de la CRAC”, dijo.
Por otro lado, informó que los policías comunitarios denuncian la campaña de hostigamiento que ha encabezado el Ejército porque ayer (martes), sus compañeros fueron expulsados de la Casa de Justicia de Juchitán.
Asimismo, dijo que el Ejercito esperó al coordinador de la Casa de Justicia de Juchitán, Fructuoso Sánchez Cruz, para amedrentarlo; cuando intentaba salir de la comunidad fue detenido y en múltiples ocasiones los militares lo incitaron a retirarse con amenazas, lo revisaron y le quitaron un arma que ocupa para defenderse.
Explicó que en los hechos ocurridos en la Casa de Justicia, los policías comunitarios fueron desarmados y el inmueble está en manos de la gente impuesta por el gobierno del estado.
Muñoz Guzmán dijo que los policías comunitarios solicitan de la manera más atenta y apremiante apoyo para brindar certeza y justicia en “complicado caso”.

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