Intervendrá ante Peña para que tengan justicia, dice la CIDH a familiares de desaparecidos en Iguala

“Se han ignorado profundamente de manera grosera las tragedias que han vivido las personas que hemos escuchado, a las que han violado sus derechos humanos”, dice la presidenta del organismo, Rose-Marie Belle, en una reunión

Alejandro Guerrero

Iguala

Integrantes de la delegación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) encabezada por su presidenta Rose-Marie Belle Antoine, se reunieron ayer en el sótano de la parroquia de San Gerardo de esta ciudad con familiares de víctimas de desaparición forzada del comité Los Otros Desaparecidos, con quienes asumió el compromiso de buscar justicia.
Adelantó que llevará sus demandas plasmadas en un pliego petitorio ante el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, o miembros de su gabinete con quienes tiene programada una reunión para hoy.
Desde el mediodía de ayer y hasta después de las 2 de la tarde, Rose-Marie Belle, el vicepresidente James L. Cavallaro, el secretario ejecutivo Emilio Álvarez Icaza y la abogada peruana Fiorella Melzi, se reunieron en privado con unos 100 familiares de víctimas de desaparición forzada.
En el encuentro, uno de los familiares de las víctimas de desaparición forzada, Mario Vergara quien es uno de los iniciadores de la búsqueda de fosas clandestinas, leyó un manifiesto del grupo en el que se dieron a conocer 15 puntos de su pliego petitorio.
Demandan un perito independiente, seguridad, justicia, recursos económicos y que la seguridad del municipio siga a cargo de la federación y no del municipio, entre otros.
Después se transmitió un video en el que los familiares de los desaparecidos resumieron a los representantes de la CIDH los 10 meses de su integración, que los ha llevado al hallazgo y recuperación de 104 cuerpos exhumados de fosas clandestinas.
Evidenciaron la falta de capacidad y de interés de las autoridades mexicanas para atender su demanda de justicia y de recuperación de sus familiares desaparecidos.
Este video removió los sentimientos de muchos de los familiares, y varios salieron llorando del sótano.
Posteriormente los representantes de la CIDH se reunieron en mesas de trabajo con los familiares de desaparecidos, quienes les entregaron informes de sus desaparecidos y les dieron a conocer sus testimonios de este proceso. Ahí se permitió a los reporteros tomar fotografías, pero no audio ni video.
Frente a los defensores de derechos humanos, los familiares mostraron fotografías de sus familiares ausentes y en su mayoría, llevaban sus playeras negras que los distingue por la leyenda “Te seguiré buscando hasta encontrarte” e “hijo, mientras no te entierre, te seguiré buscando”.
En un mensaje que dio a los familiares de desaparecidos, la presidenta de la CIDH Rose Marie Belle con el apoyo de su traductora, dijo, “es muy difícil encontrar palabras después de todo lo que escuchamos hoy, sabemos que ustedes no quieren palabras vacías porque son muchas las que han recibido ya”.
Añadió, “el mensaje más importante que les puedo dejar es que la CIDH va a aprovechar lo que ha escuchado, y los hemos escuchado bien, y no sólo hemos escuchado tragedias, numerosas tragedias, sino que también hemos escuchado el dolor. Para una comisión que trabaja con los derechos humanos hemos escuchado que se dice impunidad y que se han ignorado profundamente de manera grosera las tragedias que han vivido las personas que hemos escuchado, a las que han violado sus derechos humanos”.
La presidenta de la CIDH dijo que lo que esta comisión ha visto y reconocido es que la tragedia de los 43 normalistas de Ayotzinapa no es un hecho aislado, “lo de los 43 fue un catalizador”.
Informó que en su reunión con el gobernador electo, Héctor Astudillo Flores la noche del martes, es lo que le hicieron ver, “que no nada más  se quede ahí”.
“Nos queda claro que hay un patrón de desapariciones y de tortura que se han dado por muchos años ya en México. Lo que nos preocupa y lo hemos escuchado de muchos de ustedes, es que sus familiares tienen miedo, tienen miedo por sus vidas y lo que han encontrado en su búsqueda por la verdad y la justicia, es miedo”.
Dijo que escucharon de los familiares de desaparecidos que “esa confianza que deberían tener en el sistema de justicia que los debería de proteger, no la tienen y hemos escuchado bien que aquellas personas que van a entrar en funciones, no tengan la independencia suficiente para poder protegerlos a ustedes, y estas son preocupaciones muy muy fuertes para los derechos humanos”.
En relación con el señalamiento de que muchas de las familias vendieron sus propiedades y gastaron todos los recursos que tenían para pagar los rescates que los delincuentes les pidieron por su familiar secuestrado, al cual no regresaron a pesar de haber entregado el dinero pedido, dijo que una de las cosas que surgieron “y que me queda claro con lo que hemos dicho, es el impacto que tienen estos actos en las familias, en los niños, en las esposas y los esposos, el impacto que tienen estos hechos en su sustento también y que al parecer los estados no han podido responderles”.
“Ustedes nos han dicho que no quieren más recomendaciones, tomamos nota y me queda claro que ustedes saben exactamente lo que necesitan, y lo que les puedo prometer, de lo que puede hacer la comisión es que hablaremos con la voz fuerte que tiene la comisión para representar las voces de todos ustedes”.
Informó que este día se reunirá con Peña Nieto o autoridades de su gabinete, “a quienes les vamos a dar a conocer todos los temas que nos han expresado aquí, que también son nuestras preocupaciones”.
Belle Antoine asumió el compromiso de apoyar a los familiares de víctimas de desaparición forzada, “haremos nuestro mejor esfuerzo en este compromiso que tenemos con todos ustedes que es la búsqueda de la justicia”.
Por su parte, el secretario ejecutivo en México de la CIDH, Emilio Álvarez Icaza dio a conocer a los familiares de las víctimas de desaparición forzada de Iguala que con los testimonios y documentación que les entregaron ayer, harán un informe nacional, en el que se emitan recomendaciones para el Estado mexicano.

Piden un comité que vigile, juzgue y castigue el mal trabajo de las autoridades mexicanas y sus funcionarios

Después de leer el mnifiesto del grupo Los Otros Desaparecidos de Iguala, Mario Vergara denunció ante los integrantes de la CIDH la corrupción y la impunidad en el estado de Guerrero, en el que las autoridades no cumplen con dar seguridad a los ciudadanos, sino por el contrario que están “compradas” por la delincuencia y que inclusive “este tipo de gente (los delincuentes) son las mismas autoridades de los tres niveles de gobierno”.
Evidenció que la gente ya no denuncia las desapariciones porque hay casos en los que las familias fueron amenazadas después de poner su denuncia, y en algunos casos fueron desaparecidas o asesinadas también.
Leyó los 15 puntos de su pliego de peticiones, entre los que destacó la designación de un perito independiente para confirmar la identidad de los cuerpos entregados a familiares de desaparecidos ante la desconfianza en las autoridades mexicanas.
Pidió que acabe la ola de violencia, que se forme un comité independiente extranjero que vigile, juzgue y castigue el mal trabajo de las autoridades mexicanas y sus funcionarios.
Además cuidar que los proyectos y programas verdaderamente lleguen a las familias de las víctimas, y dar medidas de seguridad a los familiares que salen a buscar fosas clandestinas.
También, un plan de búsqueda más eficiente con tecnología, y un documento oficial que los acredite como “buscadores de fosas”.
Servicios de salud para las familias, recursos económicos y herramientas para las búsquedas ciudadanas de cuerpos, “que están siendo más efectivas que las dependencias que fueron creadas para esto y que tienen un presupuesto”.
Sancionar a las autoridades que fallan en su función de seguridad, medidas cautelares a las familias que han sido amenazadas por “gente mala” y que tiene dos opciones, “una muerte rápida o una muerte lenta”.
Solicitó apoyo a las familias que han sido desplazadas por la inseguridad y que la seguridad del municipio siga a cargo de la federación hasta el esclarecimiento de la desaparición, no sólo de los 43 de Ayotzinapa, sino hasta la aparición de las más de 450 familias desaparecidas en esta región Norte.