La Asamblea Popular engañó a la población de Tixtla para ocupar cargos, acusa Gonzalo

*El recién designado síndico, Pedro Bertoldo violó el reglamento de la CRAC que prohíbe usar el sistema comunitario para buscar cargos de gobierno, afirma el promotor desde la prisión. Rogelio Ortega tiene las manos manchadas de sangre por el asesinato de dos activistas en su gestión, señala

Lourdes Chávez

Chilpancingo

El promotor de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC), Gonzalo Molina González denunció que integrantes de la Asamblea Popular Municipal, que promovían la conformación de un Concejo Municipal Popular y se integraron al Concejo Municipal de Tixtla, engañaron a la población.
Desde la prisión de Chilpancingo aseguró que siempre fueron dirigidos por el gobernador Rogelio Ortega Martínez, y utilizaron a la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) para ocupar los espacios de elección popular.
El luchador social, detenido el 7 de noviembre de 2013 reveló que varios promotores que ahora están en el Concejo Municipal nombrado por Congreso local para organizar las elecciones extraordinarias del municipio, lo buscaron con anticipación.
Sin dar nombres afirmó que le pidieron avalar la entrega del Ayuntamiento al gobernador, lo que finalmente hicieron el 9 de julio y que representó la división del movimiento popular que se conformó para apoyar el movimiento por la presentación de los 43 alumnos de la Normal Rural de Ayotzinapa desaparecidos.
Entre las acciones que convocaron los padres de familia lograron el boicot de la elección para alcalde el 7 de junio, y como alternativa a los gobiernos que surgen de los partidos políticos, comenzaron a organizar asambleas para integrar el Concejo Popular Municipal.
Se separaron en dos bloques visibles: la Asamblea Popular Municipal encabezada por representante del Comité Magisterial de Tixtla, y el Comité Promotor del Concejo, donde participan algunos grupos de la Policía Comunitaria de la CRAC, particularmente la Casa de Justicia La Patria es Primero del barrio de El Fortín, que fundó Molina González.
De la designación del integrante de la Policía Comunitaria de la comunidad de El Troncón, Pedro Bertoldo Santos como síndico del Concejo Municipal, aclaró que violentó el reglamento interno de la CRAC, que prohíbe usar el sistema comunitario para buscar cargos públicos de gobierno.
Ante versiones extraoficiales de protesta en la toma de protesta del Concejo Municipal, prevista para ayer en la tarde así como un nuevo boicot a las votaciones, Molina González aclaró que el movimiento exigirá a las autoridades los apoyos que corresponden a cada pueblo, y no van a intervenir en el proceso electoral extraordinario.
El Grupo Promotor del Consejo Popular continuará en el proceso de concienciación para construir el poder popular desde abajo, a través de asambleas en las colonias y en los pueblos, agregó.
Aseguró que cuando el poder se construye desde abajo y el pueblo comprueba su fuerza, ya no quiere retroceder, “lo vimos cuando organizamos a los grupos de la Policía Comunitaria y los caciques se sujetan a las disposiciones de la gente”.
Del gobernador, declaró que ya tiene las manos manchadas de sangre porque en su gestión fueron asesinados el maestro Claudio Castillo, durante el desalojo de maestros en Acapulco, y el activista Antonio Díaz Vivar, en la jornada electoral en Tlapa.
Denunció que “nos quiso dar atolito con el dedo”, anunciando una Ley de Amnistía que no iba a prosperar, pero que los presos políticos de la CRAC aceptaron como un mecanismo para alcanzar la libertad.
Denunció que los coordinadores y asesores de la Casa de Justicia de San Luis Acatlán, que encabezaron la negociación de la Ley de Amnistía con el gobierno estatal, en los hechos nunca apoyaron la demanda de libertad de los presos políticos.
Recordó que ellos dijeron que el único punto de negociación con el gobierno del estado era la libertad de los presos de la CRAC, pero nunca salieron a manifestarse a las calles. Tampoco lo han visitado en prisión y desconoce los alcances de su negociación.