Toma posesión entre el miedo de los habitantes de Chilpancingo por la inseguridad, dice Leyva Mena

*Vienen tiempos de solución y armonía, dice Héctor Astudillo. Como gobernador será solidario con los trabajadores que se manifiestan en demanda de sus condiciones laborales, afirma

Anarsis Pacheco Pólito

Chilpancingo

Cobijado por los ex gobernadores priistas y con la presencia del gobernador Rogelio Ortega Martínez, ayer rindió protesta como alcalde de Chilpancingo el priista Marco Antonio Leyva Mena, quien reconoció que el miedo provocado por la inseguridad se ha apoderado de la población capitalina.
En la primera fila de invitados se sentaron el ex gobernador Rubén Figueroa Alcocer, el ex gobernador y hoy senador René Juárez Cisneros, acompañados por el diputado local priista Héctor Vicario Castrejón y el presidente estatal del PRI, José Parcero López.
Entre fallas técnicas, mala organización y protestas de burócratas en la entrada principal del salón Diamante, ubicado frente al Museo Interactivo La Avispa, Leyva Mena reconoció que su gobierno está obligado a ganar la batalla contra la inseguridad.
El diputado local Víctor Toledo tomó la protesta al nuevo alcalde en presencia del gobernador Rogelio Ortega Martínez, el gobernador electo Héctor Astudillo Flores, la presidenta del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Lambertina Galeana Marín, y el alcalde saliente Mario Moreno Arcos.
En su intervención de 14 minutos, Leyva Mena señaló que la “alarma cunde en los ciudadanos y éstos, provocados por su pánico, consternación e impotencia, lanzan su amenaza de hacer justicia por ellos mismos”.
“Hoy es una hora crucial para Chilpancingo, nos encontramos en un punto de quiebre de nuestra sociedad y por consecuencia de definiciones, hoy el miedo se ha apoderado de nuestra ciudad”, agregó.
El flamante alcalde pidió la colocación de un video que serviría de introducción, pero debido a las fallas técnicas pidió que lo quitaran, por lo que determinó continuar con su discurso.
En su intervención dijo que en Chilpancingo hay dolor de las “viudas y sus familias, las madres entre llanto cierran los ojos de sus hijos”, aunque no definió a qué viudas se refería, mientras en el fondo del salón se escuchaban las consignas de trabajadores burócratas que exigían el pago del bono de fin de sexenio al gobernador Rogelio Ortega Martínez.
Leyva Mena reconoció que los jóvenes capitalinos son presa fácil “para emplear o drogar por falta de oportunidades”, y por ello su gobierno marcará objetivos enfocados a la recuperación de espacios públicos.
Insistió en que para el rescate de los espacios públicos se debe contar con el apoyo de la “sociedad civil”.
“Esta es una batalla que estamos obligados a ganar, no podemos claudicar, juntos sociedad y gobierno debemos construir una ciudad llena de esperanza, juntos con instituciones sólidas que garanticen la plenitud de derechos”, agregó.
Reconoció que se enfrenta a una inmensa tarea, pero aseguró que no le teme, porque sería vergonzoso mirar “a mis hijos y a los hijos de ustedes por no haber intentado vencer la lucha contra la inseguridad”.
Señaló que durante su administración se dedicará a aplicar la ley sin privilegios, sin influencias, sin amiguismos o compadrazgos, “como lo ha dicho mi gobernador electo Héctor Astudillo Flores”.
En su discursó hablo sobre el caso Iguala, del que dijo que es una muestra palpable donde el Estado de derecho se flexibilizó y se volvió complaciente con los poderes fácticos.
Señaló que no se puede ser indiferente a lo que sucedió en Iguala, pensar “que todo sigue igual”, pues sería un error político y un cinismo ético y moral, por lo que no puede haber amparo ante “tan abominable crimen”.
Planteó que ahora que tome protesta como gobernador Héctor Astudillo Flores, existirá la sensibilidad para ayudar a un mejor desarrollo en la capital, en el que también se involucren los diputados priistas Víctor Toledo, Beatriz Vélez, María Luisa Vargas y Ricardo Moreno.
“En esta hora Guerrero transita por un momento de crisis, sin dudar la salvación del momento la da la política, no es la violencia la que permitirá mirar el futuro con esperanza”, señaló.
Informó que dentro del cabildo se impulsará la comisión de derechos humanos, que cuidará los derechos ciudadanos ante los atropellos de alguna autoridad municipal.
Insistió que su gobierno será de participación social, por lo que instalará el consejo ciudadano que sesionará una vez al mes, para señalar los asuntos de gobierno, y anunció que estará integrado por Florencio Salazar Adame, Carlos Vega Memije, Roberto Arroyo Matus, Leticia Atilano y Ramón Carreto Soto.
También se instalará el consejo intermunicipal religioso, en el que se convocará a diferentes líderes pastorales para que juntos diseñen una agenda común de trabajo que impulse los valores que “dan consistencia y esencia al ser humano”.

Plataforma digital para calificar al gobierno

Dijo que en los primeros 100 días de gobierno se pondrá en marcha una plataforma digital para calificar a las autoridades capitalinas, desde una aplicación de su celular, con el objetivo de ayudar “a gobernar bien”.
Asimismo, dijo que propondrá al nuevo cabildo la creación del Instituto de Planeación, que evite el crecimiento desmedido de Chilpancingo, así como un instituto de vivienda que entregará crédito a las familias para que puedan comprar una casa.
También propuso la creación de los institutos del deporte, del ambiente , de cultura, de la mujer y del emprendedor, en los que se emplearán los mismos trabajadores del Palacio Municipal después de una “reingeniería laboral”.
Informó que convocará a foros para la elaboración del Plan Municipal de Desarrollo, en el que se expondrá la construcción del parque público de 90 hectáreas compradas por el ex presidente Saúl Alarcón Abarca, una ciclo pista de montaña y la compra del parador gastronómico para crear empleos.
Por su parte, el gobernador Rogelio Ortega Martínez, en un breve discurso, llenó de reconocimientos a los actores políticos presentes, y celebró la realización de las elecciones.
Recordó que las elecciones se desarrollaron en condiciones difíciles debido a las movilizaciones de organizaciones sociales, pero gracias a la participación de la población que salió a votar se logró cumplir con el proceso.
El gobernador electo Héctor Astudillo Flores, quien se llevó el mayor número de ovaciones en el acto, dijo que estará cerca de las administraciones municipales, y por ello su presencia en el relevo de Iguala, Chilapa, Chilpancingo y Zihuatanejo.
Aprovechó para decir que su gobierno será solidario con los trabajadores que se manifiestan para exigir sus condiciones laborales, aunque en ningún momento hablo de los burócratas que estaban protestando en la puerta principal del salón en demanda del bono sexenal.
“Los chilpancingueños y las chilpancingueñas hemos tenido una ruta de amplia sensibilidad para el conflicto, por ello hemos sido históricamente la capital del estado, y hoy, amigos y amigas, hoy vale la pena expresar nuestra absoluta solidaridad con los que se manifiestan con razón y a los que se manifiestan sin razón convoquémoslos en los próximos días al diálogo, al entendimiento porque siempre es más importante el interés colectivo”, enfatizó.
Dijo que Chilpancingo entiende la problemática y que los hombres y mujeres de esta tierra lo han vivido y por ello lo entienden y “es su responsabilidad histórica a veces abrazarlos y a veces conducirlos”.
Señaló que en la capital vienen tiempos de solución y armonía y con la nueva comuna y en 27 días que tendrá la responsabilidad como gobernador van a caminar para construir un Guerrero más armónico, con mas trabajo y más seguridad.
Reconoció el trabajo realizado por el alcalde saliente Mario Moreno Arcos, quien dijo que enfrentó situaciones difíciles.
Señaló que Chilpancingo empezará una nueva etapa, en la que saldrá adelante ante los problemas que ha enfrentado en los últimos años.
El próximo gobernador recordó que Guerrero ha vivido cosas difíciles por los hechos ocurridos en Iguala, lo que jamás debe repetirse, por lo que en momentos de crisis debe haber acciones que permitan sacar lo mejor.