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Dirigen el tránsito policías desarmados en 2014 en tres municipios de Tierra Caliente

Los municipios de Coyuca de Catalán, Tlapehuala y Pungarabato pusieron a operar sus cuerpos policiacos municipales después de 10 meses inactividad; tendrán el control de la vialidad, según un acuerdo entre los alcaldes y los policías.
Los policías municipales aceptaron salir a las calles a vigilar y controlar el tránsito en las avenidas principales, pero también de seguridad privada en edificios y áreas públicas.
Esta semana, el municipio de Coyuca de Catalán incluso instaló a un comandante al frente de los policías municipales para encargarse de coordinar las nuevas actividades que les fueron encomendadas.
En Tlapehuala los policías salieron a las calles a controlar vialidad en las principales calles. En Altamirano ya se observan sobre la avenida principal más policías de tránsito.
En los nueve municipios de la región tienen el control de la seguridad la Policía Federal y el Ejército. El armamento decomisado a las policías municipales se encuentra bajo resguardo del gobierno del estado.
Los policías salieron con uniforme, y en Pungarabato con chalecos fluorescentes, pero sin armas. Algunos fueron instalados cómo veladores y vigilantes en edificios públicos.
Durante los últimos 10 meses solamente estaban obligados a presentarse por las mañanas al pase de lista, y a actividades menores.
La mayoría de los ayuntamientos ya firmaron el convenio del Mando Único, pero los policías no tienen actividad ni han sido integrados a las corporaciones del estado o de la federación, solamente cobran sueltos sin trabajar.
Por tal motivo, los nuevos alcaldes decidieron poner a funcionar a los policías en actividades de seguridad y de vialidad. En Tlapehuala hay unos 40 policías, en Coyuca de Catalán 50 y en Altamirano 60. (Israel Flores / Ciudad Altamirano).

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