Humberto Musacchio

LA REPÚBLICA DE LAS LETRAS

Despiden a Cremoux y Cabrera

La tecnocracia no sabe con qué se come la cultura. Desde hace tiempo le declararon la guerra a Raúl Cremoux, director del Canal 22, al que asignaron un mísero presupuesto anual que con los recortes quedó en unos 167 millones de pesos, siete veces menos que el Canal 11. A Cremoux le armaron una campaña de prensa porque “censuró” a varios colaboradores. Si hubiera permitido que en un canal del Estado se expusieran críticas y desahogos contra el gobierno, más pronto lo hubieran despedido. En fin, que aguantó hasta la semana pasada y ahora la pregunta es si los enemigos de la cultura no matarán el Canal 22… Caso distinto es el de Enriqueta Cabrera, que ya estaba viviendo horas extra como directora del canal 11, pues ella fue llevada a ese cargo por Emilio Chuayffet, y al ser defenestrado este funcionario, era obvio que lo seguirían sus validos en el viaje a la calle. Ya sucedió. Ahora habrá que ver quiénes llegan a dirigir uno y otro canal y si tienen un perfil adecuado para estar al frente de una institución cultural.

¿Cervantino XLIII o 43?

Suspicaz, el colega Miguel de la Vega le preguntó a Jorge Volpi por qué el cartel de este año emplea números romanos para el XLIII Festival Cervantino, cuando que en años anteriores se usaron números arábigos. Volpi le reviró que en su discurso inaugural del año pasado hizo referencia a Ayotzinapa y le informó que la obra musical comisionada para este año a la compositora Marisol Jiménez se intitula, precisamente, XLIII Memoriam vivere (43 memoria viva), y está dedicada a los muchachos de Ayotzinapa “y a todos los desaparecidos en México”.

Premio al equipo de Aristegui

En Medellín, Colombia, el pasado miércoles se anunció que el Premio Gabriel García Márquez que otorga la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano, se concedió este año al equipo de Carmen Aristegui por su trabajo La casa blanca de Enrique Peña Nieto, que, de acuerdo con el jurado, “es un ejemplo impecable de independencia periodística” que puso al desnudo un caso de corrupción y un conflicto de intereses que sumieron al gobierno mexicano en una crisis de credibilidad mediante una labor que echó mano de “documentación y testimonios comprobables, sin necesidad de recurrir a fuentes anónimas ni indirectas. El resultado es una demoledora acusación presentada de un modo conciso, claro y con un impresionante grado de precisión”. El equipo de reporteros de Carmen Aristegui lo integran Rafael Cabrera, Daniel Lizárraga, Irving Huerta y Sebastián Barragán, colegas emblemáticos de lo mejor de nuestro periodismo. ¡Felicida-des!

Las frases de Yogi Berra

Murió el beisbolista Yogi Berra, quien llegó a 14 series mundiales de las que ganó 10, motivo suficiente para que tuviera un lugar en el olimpo de las celebridades. Pero el receptor de los Yanquis también ganó fama por sus frases ocurrentes o estúpidas, según se vea, mismas que la literatura recogerá algún día: “Ya nadie va a ese lugar, hay demasiada gente”, “El béisbol es 90 por ciento mental, la otra mitad es física”, “Nunca dije muchas de las cosas que dije”, “Si no sabes a dónde vas, puedes terminar en otro sitio”, “No estoy en una mala racha, solamente no estoy bateando”, “Casi siempre tomo una siesta de dos horas, de la 1 a las 4”, “Siempre ve a los funerales de otras personas, de lo contrario ellas no irán al tuyo” y estas, enviadas por el gran Lalo Mejía, jonronero del periodismo cultural: “no se puede batear y pensar al mismo tiempo”, o cuando le preguntaron si su pizza la quería en ocho o en cuatro partes: “Ocho, porque tengo mucha hambre”; o cuando le pidieron la hora: “¿Ahorita?” ; y por supuesto la más repetida: “Esto no se acaba hasta que se acaba”, que según informa Lalo, la pronunció como manager de los Mets en 1969, no cuando era jugador.

Breviario…

A partir de 1967, cuando publicó Los juegos, sátira feroz de la vida pública mexicana tanto política como literaria, René Avilés Fabila ha publicado ya 35 libros que comprenden cuentos, novela y varia invención. Acaban de aparecer de este escritor las reediciones de El bosque de los prodigios, que salió originalmente en 2007 y ahora con ilustraciones de Guillermo Ceniceros, y Cuentos de hadas amorosas y otros textos, obra de 1998. @@@ Otra vez está sobre Consuelo Sáizar la andanada no de acusaciones, pues nadie tiene pruebas, pero sí de sugerencias sobre malos manejos de dinero. Como bien sabemos y sufrimos, lo común es que los funcionarios salgan enriquecidos de los cargos públicos. Pero también hay gente que trabaja con una cabal honestidad y que al terminar su encargo regresa a ganarse la vida en otra cosa o a vivir de sus ahorros. Recordemos el dicho de Carlos del Río, ministro de la Suprema Corte: “Lo pendejo y lo corrupto no se pueden ocultar”. Sáizar no es una ni otra cosa. @@@ La malhadada costumbre de cambiar el nombre a tareas y realizaciones que tienen una trayectoria loable, reconocible, llevó a travestir el festival Fotoseptiembre, como se le conoció durante 20 años, para endilgarle el poco imaginativo título de Festival Internacional de Fotografía Foto México (valga la redundancia).