El informe de la CIDH tiene excesos; Iguala no es el país: Campa
Jacob Morales Antonio
El subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación (Segob), Roberto Campa Cifrián, afirmó que es un “exceso” de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) decir que la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa es la realidad de todo el país, y reveló que durante el gobierno perredista de José Luis Abarca Velázquez las desapariciones de personas aumentaron de 2 a 60 por año.
Campa informó que en próximos días la procuradora de la República, Arely Gómez, anunciará cómo se atenderán las recomendaciones de la CIDH, de trasladar la investigación de la desaparición a la subprocuraduría de Derechos Humanos y designar fiscal especial.
En entrevista en el noticiero de Televisa de Carlos Loret de Mola, el funcionario dijo que hay un “despropósito” en el informe de la CIDH.
El viernes, la CIDH, encabezada por su presidenta Rose-Marie Belle Antoine, concluyó una visita de cinco días a México
En su informe preliminar señala que México está sumido en una “grave crisis de derechos humanos” y una situación “extrema” de impunidad y violencia.
Campa dijo que el informe tiene una “intencionalidad… es importante decir que la conclusión del informe grave crisis, fue la misma que declaró en entrevista con Proceso hace tres semanas Álvarez Icaza”, secretario ejecutivo de la CIDH.
Dijo que los expertos escucharon 13 testimonios, pero que sus experiencias no son recientes, cuatro son de hace 40 años, uno del 2006, uno del 2010, dos del 2013; uno de Veracruz y de Michoacán, “uno es de Iguala que ciertamente es reciente”. Además de otros tres de los que no se precisa de qué época son.
Insistió: “de ninguna manera me parece que podemos aceptar que se trate de asuntos que sucedieron en los últimos meses como me parece dio la impresión que quedó en las conclusiones del informe”.
–¿Es injusto entonces?–, pregunta el conductor.
–Creo que el documento tiene excesos, decir por ejemplo que la realidad de Iguala es la realidad del país, nos parece que es un exceso.
–Pero sí es parte de la realidad del país–, dice Loret de Mola.
–Claro. Que sea parte de la realidad del país no es que sea la realidad del país. Lo que le dijeron por ejemplo a los miembros de la Comisión en Iguala, es, nosotros metemos una varilla en el piso y si huele mal rascamos porque encontramos un cadáver.
Yo le pregunto a la gente que nos está escuchando… entendiendo que hay muchas veces dificultad para creerle al gobierno, ¿de a de veras es la realidad de México?. La gente mete una varilla en nuestro país, y si huele mal encuentra un cadáver. Me parece que de ninguna manera lo podemos aceptar, no como gobierno, sino como país.