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El primer debate demócrata consolida el papel de favorita de Hillary Clinton

DPA

Washington / Las Vegas

La ex secretaria de Estado Hillary Clinton salió ayer reforzada del primer debate para las primarias demócratas, en el que demostró mayor experiencia y dominio de los temas que el resto de los candidatos para las elecciones presidenciales de 2016 en Estados Unidos.
Toda la atención mediática del debate, retransmitido desde Las Vegas (Nevada) por la cadena de televisión CNN, estuvo centrada en el enfrentamiento entre Clinton y Sanders, que se encontraron por primera vez cara a cara.
La entrada en las primarias demócratas de Sanders, que se define como socialista, ha forzado a Clinton y al resto de candidatos a girar a la izquierda durante la campaña y abordar temas como la desigualdad y la necesidad de aumentar el salario mínimo.
Como se vio en el debate, el senador independiente por Vermont tendrá que luchar durante la campaña para las primarias demócratas con el estigma de ser socialista en EU, donde el término tiene una connotación negativa, y probablemente será atacado por los republicanos por sus críticas al capitalismo.
“¿Me considero parte del capitalismo de casino por el que tan pocos tienen tanto y muchos tienen tan poco? No”, dijo Sanders, quien consideró que EU debería seguir el ejemplo de países como Dinamarca, Suecia y Noruega en protección social de los trabajadores.
“No somos Dinamarca. Somos EU”, le recordó Clinton, quien defendió el sistema capitalista.
El debate abarcó gran variedad de temas, desde la crisis económica hasta la regulación de las armas, pasando por el racismo, la reforma migratoria y la política exterior.
A pesar de sus discrepancias en muchas cuestiones, Sanders salió en defensa de Clinton en la polémica sobre los correos electrónicos que la precandidata envió desde una cuenta privada cuando era secretaria de Estado.
Clinton recordó que los republicanos han tratado de utilizar escándalos como el de los e-mails o el del ataque al consulado estadunidense en Bengasi.

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