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ESTRICTAMENTE PERSONAL

Miedo en la piel  

Raymundo Riva Palacio

Presionado por sectores diversos que por semanas exigieron el diálogo y el fin a las diatribas, el presidente Vicente Fox tomó la iniciativa y le envió una carta al líder del PRI, Roberto Madrazo, para que tuvieran un encuentro en Los Pinos. Madrazo aceptó sin demora alguna y, aparentemente para no quedar solo, retransmitió el mensaje a los otros líderes de partidos. Fox, como jefe del Ejecutivo, está obligado a reencauzar la política nacional y establecer marcos de referencia para dirimir las disputas, pero Madrazo está urgido del diálogo por una razón que tiene seis letras: Oaxaca.

En Oaxaca arrancará en agosto la temporada caliente electoral, que incluye la competencia por 10 gubernaturas. Oaxaca, que no es considerado un estado clave para el sique político como el estado de México o Nuevo León, trasciende en esta ocasión al estado y al 2004, y se implanta en el 2006 por razones tácticas. Sectores influyentes del PRI dicen que Madrazo se está jugando la segunda tercera parte de su candidatura a la Presidencia. La primera la perdió con la debacle del cacique Víctor Cervera Pacheco, arrollado al buscar la alcaldía de Mérida; y la última será Tijuana, donde competirá por la presidencia municipal Jorge Hank Rhon, el hijo de su viejo mentor y protector Carlos Hank González, quien no tiene garantizada la victoria pese a las carretadas de dinero que inyecta a su campaña.

La elección más importante que presumen definirá el destino de Madrazo para el 2006 es Oaxaca, donde se encuentra el bastión de su grupo de choque político dentro del PRI, gobernado por José Murat y cuyo candidato al cargo es Ulises Ruiz, el operador político de Madrazo y a quien se debe la cimentación de la relación con Murat. Pero el Oaxaca de Murat está hirviendo y Madrazo necesita despresurizarlo y negociar con el gobierno federal una tregua que le permita llegar sin alteraciones extraelectorales que pudieran llevar a la derrota de Ruiz frente a Gabino Cué, el ex presidente municipal de Oaxaca capital, ex priísta que compite con una alianza de la oposición y el respaldo de connotados priístas, incluidos dos ex gobernadores del PRI, su protector Diódoro Carrasco y Heladio Ramírez.

Murat está metido en un enorme problema que, en los próximos días si se le puede creer a la PGR, empezaría a aclararse. Se trata del atentado que sufrió hace unas semanas y sobre el cual abundan quienes creen que fue un autoatentado. Murat se ha defendido con la indignación en la boca y en desplegados de prensa. En todo caso, consideran quienes conocen el asunto, la PGR está lista para señalar que no hubo atentado –el Ejército, que tiene a Oaxaca como uno de los puntos de mayor vigilancia en el país, aportó elementos con los reportes de su inspección de rutina que no dio con ningún sospechoso–, y que este se montó para ocultar una buena noche de parranda. Ya debía de haber salido el dictamen, pero como confió recientemente Fox a unos políticos, no saben cómo manejarlo para evitar daño a Murat.

A Madrazo no le conviene que su único gobernador realmente leal sea lastimado en su credibilidad, porque las acusaciones sobre cómo está presionando a actores políticos y sociales en Oaxaca para que se alineen a la candidatura de Ruiz, pueden pasar de la simple denuncia a referencias verosímiles. Murat ha venido operando para tener una hegemonía absoluta en Oaxaca, e inclusive trabajó una división dentro del PRD, estimulando que una de sus figuras en el estado rompiera con el partido y se integrara a una agrupación de izquierda para restarle votos en la elección.

Un dictamen de la PGR sobre la fantasía de Murat del atentado, sería devastador para el gobernador y muy costoso para Madrazo. El líder del PRI necesita negociar con el gobierno para evitar ese desenlace. El equilibrio en Oaxaca es muy frágil, y aunque Ruiz sostiene que aventaja por más de 20 puntos a Cué, quienes conocen el estado y tienen sus propias mediciones estiman que prácticamente están empatados, con el priísta ligeramente arriba. El problema adicional para Madrazo es el candidato Ruiz, un hombre de terrible fama en la política mexicana.

Ruiz es un hombre sin personalidad que cuando uno lo conoce se ve apocado y sin talento retórico. Pero a decir de quienes lo han visto actuar en elecciones, es una fiera en la trampa. Comenzó a cobrar fama dentro del PRI hace casi tres lustros cuando en la campaña de Salvador Neme para la gubernatura de Tabasco, Madrazo era el presidente del PRI en el estado y Ruiz su principal operador de campo. Cuentan testigos que la manera como operó la noche y madrugada de la elección fue mediante el viejo procedimiento del cambio de urnas para garantizar casillas casi absolutas para Neme. El resultado fue una votación de 82 por ciento para el priísta, que contendió contra Andrés Manuel López Obrador.

Ruiz se educó como operador físico del gran mapache priísta, ahora refugiado en el PRD, José Guadarrama, el hidalguense a quien le responsabilizaron la operación de campo durante la elección presidencial en el 2000, y quien, a decir de los testigos del salón de guerra de la campaña de Francisco Labastida, hasta el mediodía los tuvo convencidos de que la desventaja que iban acumulando frente a Fox sería remontada durante la tarde con el famoso “voto verde”, que nunca llegó. Guadarrama se fue derrotado y con la sospecha de que recursos que forman parte del expediente Pemexgate, terminaron en su cancha.

Hoy, dos marrulleros profesionales apoyan a un súper mapache para gobernar Oaxaca. Pero el eslabón, que es Murat, está a punto de ser roto. Es posible que esto haya detenido una nueva campaña contra Cué, a quien desean acusar por irregularidades administrativas en la alcaldía de Oaxaca. Antes ya hicieron una cacería judicial a sus colaboradores, girando órdenes de aprehensión contra su gente, un ejercicio muy bien conocido por Ruiz, quien durante la lucha de Madrazo contra Beatriz Paredes por la presidencia del PRI, hizo lo mismo con allegados a ella. Oaxaca, ciertamente, empieza a heder por el lado del PRI, en una contaminación que Madrazo necesita cortar antes que sea un motivo para amputarle el sueño del 2006.

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