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Denuncian beneficiarios que el IMSS dejó de pagarle a instructores de baile y yoga

Abel Salgado

La señora Lupita Bureos denunció que la dirección del Centro Seguridad Social del IMSS dejó de pagarle a los instructores de baile de salón y yoga, en el edificio ubicado en la avenida Cuauhtémoc, porque ya no hay presupuesto para el pago de sus salarios.
Explicó que esas clases se dan a personas de tercera edad y son bajo prescripción médica, que en su caso fue por ataques de ansiedad. Los instructores siguen dando clases desde el mes pasado sin el pago de sus quincenas.
En agosto, la directora Guadalupe Vergara les informó a los instructores, también conocidos en el centro de Seguridad Social del IMSS como monitores, que ya no se presentaran porque no había presupuesto.
En llamada a la redacción de El Sur, la también jubilada Lupita Bureos aseguró que no era posible porque ella trabajó en la oficina de Costos y Presupuestos del IMSS, dentro de las proyecciones que analizan se considera el salario anual de los trabajadores, incluyendo los monitoristas.
Cada instructor recibe el pago diario de 35 pesos por clase. Consideró una retribución muy baja para la atención que dan, porque ella llegó en el año 2012 diagnosticada por su sicóloga y médico familiar con alto grado de ansiedad.
Como parte de su descontento, un grupo de derechohabientes hablaron con la directora Guadalupe Vergara a quien le propusieron que si el IMSS no tiene presupuesto, ellas pagarían por clase. La directora se negó y argumentó que eso sería incurrir en un acto de lucro dentro de la institución y no se permitiría.
Los monitoristas siguen dando clases sin ningún costó, aseguró Lupita Bureos.
En su caso, precisó son dos los instructores que todavía siguen yendo a impartir cursos de yoga y baile de salón, pero hay más que también dan clases de aerobics, entre otras actividades. Pidieron al delegado, José Luis Ávila Sánchez, que reasigne un presupuesto porque la mayoría de quienes asisten son personas de la tercera edad que exigen una vejez de calidad.

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