Filas de más de cinco horas para cobrar Pensión Guerrero en Zihuatanejo

Brenda Escobar Zihuatanejo

Funcionarios de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) en el estado mantuvieron parados más de cinco horas a unos 700 adultos mayores de Zihuatanejo que acudieron a recibir el pago del programa Pensión Guerrero.
Hubo ancianas que se desmayaron por el sol y porque no habían desayunado.
El calor que se sintió ayer en esta ciudad fue sofocante, lo que contribuyó a que aumentara la desesperación de la mayoría de los pensionados por la lentitud con que avanzaban en la fila.
La sede fue cambiada “por órdenes superiores”, según funcionarios estatales, pues antes se hacía en el Centro Social municipal y esta vez se decidió que los adultos mayores tenían que acudir a la sucursal del Banamex porque “más adelante” el pago lo recibirán con una tarjeta de débito.
Hubo inconformes, como Fidel Figueroa, de la comunidad serrana de Vallecitos de Zaragoza, quien se quejó de que los trabajadores estatales acudieron a aquella comunidad, pero no le pagaron a toda la gente y que hubo señoras como Micaela y Vicenta Marroquín que ante la necesidad del recurso, las obligaron a bajar a Zihuatanejo a cobrarlo, “eso es un castigo para los viejecitos de la sierra”.
Expresó que era “una tontería” el nuevo modo de cobrar la pensión “porque en la sierra no hay bancos, que según nos van a dar una tarjeta, los viejos que cobramos en la sierra no tenemos modo de bajar, cómo le vamos a hacer si allá no hay bancos”.
La fila de adultos mayores cubrió toda una cuadra, es decir, unos 200 metros, desde donde hacen esquina las avenidas Benito Juárez y Ejido, para que pudieran llegar hasta donde los empleados de Banamex y de la Sedesol que pagaban.
Desde temprano, trabajadores de la Dirección de Desarrollo Social de Zihuatanejo no se daban abasto para repartir bolsas con agua y rebanadas de naranja a los adultos mayores.
Una de las trabajadoras que atendía a los abuelitos manifestó que la nueva disposición los afectó, “a todos, si lo hubieran seguido haciendo en el Centro Social, ya hubiéramos terminado desde hace horas”.
También tuvieron quehacer los paramédicos de la Cruz Roja y del departamento de Bomberos y Protección Civil, pues hubo adultos mayores que se desmayaron por hambre, cansancio y calor.
Cerca de la 1:30 de la tarde, una empleada de la dependencia estatal tuvo que soportar los gritos de protesta de los adultos mayores cuando por grupos se les acercaba para informarles que los empleados del banco no les alcanzarían a pagar y que era mejor que se retiraran para que regresaran hoy o mañana de las 9 de la mañana a 4 de la tarde.
El servidor público de la misma dependencia, Heriberto Berrú Nájera, dijo que esta medida fue una “orden superior” porque a partir del próximo pago, los adultos mayores recibirán su pensión con una tarjeta electrónica, posiblemente de débito, “por lo mientras, tenemos que trabajar así”.