Buscará los permisos para la planta separadora de basura, anuncia el Ayuntamiento de Chilpancingo

En octubre del año pasado la Profepa clausuró de manera temporal la construcción de la obra, porque Moreno Arcos no tenía las autorizaciones necesarias, dice el director de Medio Ambiente y Recursos Naturales del municipio

Anarsis Pacheco Pólito

Chilpancingo

La administración del priista Mario Moreno Arcos no obtuvo los permisos necesarios para evitar un problema de impacto ambiental antes de construir la Planta Separadora de Residuos ubicada entre esta capital y Tixtla, y la obra tiene un año cancelada.
En octubre del año pasado la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró de manera temporal la construcción de la Planta Separadora de Residuos, tras afectar 70 mil 869 metros cuadrados de selva baja, donde predominan tipos de árboles como cedros, tepemezquite, huizache, encino, copales y magueyes .
En la administración pasada el proyecto estaba a cargo de Daniel Morales, quien es el presidente del Patronato de la Feria de San Mateo, y no presentó la autorización de cambio de uso de suelo que expide la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
A un año de la construcción de la planta separadora en un terreno de 68.12 hectáreas, al nuevo gobierno priista de Marco Antonio Leyva Mena le tomará dos semanas concluir con los requerimientos para contar con los permisos adecuados y retomar el trabajo.
El año pasado la dependencia federal canceló el proyecto, y no se hizo lo necesario para reactivar la construcción, lo que provocó que el viejo relleno sanitario continuara funcionando a pesar de haber rebasado su capacidad hace dos años.
Consultado en sus oficinas en el Ayuntamiento, el director de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Alejandro Zepeda dijo que le tomará dos semanas retomar los trabajos para la construcción de la planta separadora.
Dijo que en el terreno ubicado en el paraje Loma Larga del municipio de Tixtla no se ha avanzado ni el 10 porciento del proyecto, sólo se ha trabajado en los caminos aledaños, por eso se canceló.
“La anterior administración no gestionó los permisos correspondientes del cambio de uso de suelo e impacto ambiental, y Profepa lo clausuró”, dijo.
El funcionario dijo que los trámites son necesarios no sólo para revocar la cancelación, sino también para obtener un presupuesto de 16 millones de pesos de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales de Guerrero (Semaren).
“Después del problema de inseguridad el segundo problema que tenemos es la basura, entonces si no actuamos de manera rápida y contundente se podrá generar un problema de salud pública”, dijo.
Comentó que el actual gobierno deberá cumplir con el estudio de cambio de uso del suelo y obtener el permiso de Semarnat.
Agregó que en dos semanas se deberá cumplir con las solicitudes para iniciar la construcción de la primera celda emergente, y dejar de utilizar el relleno sanitario que está rebasado.
“Tenemos de cinco a seis meses para construir la celda emergente y clausurar el relleno sanitario”, agregó.
Dijo que ya no seguirá trabajando la empersa que se contrató por la administración de Moreno Arcos que también trabajaba en Tlapa, y por las inconsistencias en su trabajo se determinó que se volverá hacer una licitación para contratar una empresa responsable.