Se reúnen rectores y funcionarios de la SEG; buscan alternativas para los rechazados

Rectores de universidades públicas y privadas se reunieron ayer en Protur con la secretaria de Educación en Guerrero, Silvia Romero Suárez, para intercambiar información sobre las carreras en las que pueden aceptar a los rechazados de las instituciones públicas; sin embargo, no llegaron los representantes de los tecnológicos de Acapulco y Chilpancingo.
El rector de la  UAG, Asencio Villegas Arrizón informó que la junta fue preparatoria y que se reunirán otra vez el viernes, para ofrecer alternativas a estudiantes rechazados, que tan sólo en la UAG, suman 3 mil 400. Dijo que la finalidad de la reunión es establecer un catálogo de oportunidades a los inconformes.
Indicó que en la UAG, se tienen 840 espacios disponibles. “A pesar de que tenemos a poco más de 3 mil estudiantes rechazados, que se cargan a ciertas carreras, pero hay espacios en otras. El mismo caso ocurre en las politécnicas y las tecnológicas. A ver si hay la posibilidad de que firmemos un convenio con el gobernador para que con el mismo trámite que hicieron en las escuelas, ellos, (los rechazados) puedan incorporarse a las carreras con el mismo trámite si se cuenta con el espacio”, explicó Villegas Arrizón en entrevista al concluir la reunión a puerta cerrada que se prolongó cerca de dos horas.
La reunión, puntualizó, fue preparatoria y en ella estuvieron, además de la secretaria de Educación, los subsecretarios de Educación Media Superior y Superior, además del representante de la universidad privada Sentimientos de la Nación.
Sobre la posibilidad de abrir una escuela de medicina en la región de La Montaña, el rector de la UAG explicó que la fase en la que se encuentra, está en conocer las necesidades de las regiones donde prevalece la medicina tradicional.
Comentó que aunque existe una gran cantidad de infraestructura del sector salud en la entidad, se carece del personal para que ocupen los espacios, además que la diferencia cosmogónica de los pueblos antiguos respecto al uso de la medicina alópata, modifica las propuestas que se han estado haciendo para la  zona.
“Se está haciendo una planeación que obedezca a las necesidades regionales (…). Veo que hay mucha infraestructura en salud, pero hay poco personal disponible porque la mayoría de los médicos y enfermeras somos mestizos y no queremos irnos a las comunidades indígenas, entonces lo que se necesita es que se formen médicos y enfermeras indígenas para que radiquen en esos lugares, y que cumplan con los requisitos que las instituciones exigen, con una formación profesional que no deje duda de su capacidad, con una sensibilidad y formación técnico científica, que ayude a resolver los problemas que la comunidad indígena necesita”, expuso.
Sobre la primera etapa para la fundación de esa escuela, aclaró que aún se debe evaluar el lugar donde se abrirá, e informó que se requiere la visión de los indígenas para fortalecer la propuesta. Agregó que en el proyecto están participando el presidente de la comisión de Salud del Congreso local, Enrique Herrera Gálvez; la titular de la Mujer, Rosario Herrera Asencio y representantes de algunas escuelas de Michoacán que aportarán su experiencia en la carrera en salud pública indígena.
A pregunta expresa de la cantidad de alumnos que fueron rechazados en la UAG, respondió que a nivel estatal y en todas las universidades, falta reunir las cifras de otras instituciones como los tecnológicos.
Comentó que se debe apoyar a la juventud, pues “gracias al estudio, estoy en una mejor posición (…), quiero que los jóvenes mejoren sus condiciones porque debemos ser solidarios con los jóvenes, pero no es sólo responsabilidad de la Universidad porque no es sólo darle oportunidad de estudios, sino una oportunidad de empleo”.
Detalló que hicieron examen para la licenciatura 10 mil 487 personas, de las cuales, 7 mil 028 alcanzaron un espacio y, 3 mil 400 alumnos no pudieron entrar. Agregó que hay 849 espacios. (Karla Galarce Sosa).