Deja de apoyar el PRD a Sánchez Nava pese a su precaria salud, denuncian amigos

Zacarías Cervantes

Chilpancingo

Mientras que el ex representante de la coalición Guerrero Nos Une ante el Instituto Electoral del Estado de Guerrero (IEEG), Guillermo Sánchez Nava, sigue convaleciente y mantiene un precario estado de salud con una recuperación lenta, la dirigencia estatal del PRD dejó de darle seguimiento a la investigación de los hechos e, incluso, le retiró el apoyo para el abogado que estaba asesorando a su familia.
Sánchez Nava fue agredido y dado por muerto por miembros de una brigada de priistas de la coalición Tiempos Mejores para Guerrero, que encabezó el candidato Manuel Añorve Baños, la noche del 11 de enero del 2011, cuando les tomaba fotografías despegando propaganda del candidato de la coalición Guerrero nos Une y hoy gobernador, Ángel Aguirre Rivero.
En ese tiempo Sánchez Nava, un dirigente de la izquierda histórica en el estado, era el representante de la coalición Guerrero Nos Une ante el IEEG, y actualmente sigue convaleciente, por lo que tiene que estar en forma permanente en la ciudad de México para recibir su tratamiento de rehabilitación en una clínica de especialidades.
El sábado pasado un grupo de sus amigos acudieron a su domicilio particular a visitarlo, y es que cada ocho o quince días es traído con los cuidados extremos que requiere su estado de salud.
Ese día, sus familiares y un círculo muy reducido de sus amigos, que todavía están al pendiente de él y se reúnen para darle ánimos, revelaron que la dirigencia estatal del PRD ha dejado prácticamente en el olvido al ex dirigente estatal perredista, e igual ha dejado de dar seguimiento al caso en busca de justicia.
Ante esta situación las investigaciones se han estancado y la Procuraduría de Justicia del Estado ha dejado de investigar para dar con los responsables intelectuales y materiales de la agresión.
En junio del 2011, la Procuraduría General de Justicia del Estado presentó a los priístas Celso Manzano Flores, Antonio López Velázquez e Iván Arizmendi Nava como presuntos responsables materiales de la agresión contra Sánchez, y son los únicos que han sido detenidos y permanecen encarcelados sujetos a proceso.
Entonces se dijo que estaban identificadas dos personas más, que también militan en el PRI, sin embargo no han sido detenidos.
Salvador de Jesús García, militante del PRD y amigo de Sánchez, lamentó la falta de solidaridad del presidente estatal de su partido Carlos Reyes hacia Guillermo.
“De seguro la dirigencia agachona del partido no quiere exigir que se vaya a fondo del asunto, porque no quiere incomodar al gobernador Ángel Aguirre Rivero”, señaló.
Otro de los que visitaron a Sánchez Nava el sábado, el perredista Francisco García, quien exigió por su parte que la dirigencia pida a la Procuraduría que investigue al diputado local priísta Héctor Astudillo, quien es presunto autor intelectual de la golpiza que le propinaron a Sánchez Nava pues era entonces el alcalde de esta capital.
Los perredistas informaron que el ex secretario de Derechos Humanos del Comité Estatal del PRD, Urbano Lucas, fue citado por el juez de Primera Instancia del Ramo Penal de esta ciudad para el 7 de agosto próximo, para que se caree con uno de los tres presuntos agresores de Sánchez, presos en el penal de esta ciudad.
“Ese día vamos acompañar a Urbano Lucas y vamos a exigir a la Procuraduría que informe del avance de las investigaciones y que cite a Astudillo Flores” otra vez, externó Francisco García.
Sin embargo, también exigieron que la dirigencia estatal lo siga apoyando con la asesoría legal, como lo venía haciendo hasta hace algunos meses.
Y es que dijeron que recientemente el presidente del Comité Ejecutivo Estatal, Calor Reyes, les dijo a sus familiares que “si quieren un abogado, tendrán que contratarlo ustedes porque el PRD ya no tiene dinero para seguirlo haciendo”, les dijo cuando fueron a verlo para pedirle información del seguimiento del caso.
A 19 meses de haber sufrido la golpiza, Sánchez Nava no puede hablar, no puede caminar, aunque sí mueve las manos con dificultad y reconoce a su familia y a la gente que lo va a visitar.