Atan sus manos frente a Medicina en el segundo día de protestas de rechazados

Karla Galarce Sosa

Cinco jóvenes aspirantes para cursar una carrera en la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG) ataron sus manos con un cordón y formaron una cadena humana afuera de la Unidad Académica de Medicina, en su segundo día de protestas respaldadas por el Movimiento Académico Social Alternativo del Sur (MASAS), porque sus nombres no aparecieron en las listas de admitidos.

Cuatro muchachos afirmaron que éste es su primer intento por ingresar a una de las carreras en el área de la salud de la UAG y aseguraron que lograron puntajes por arriba de los mil aciertos.

El padre de familia de una de las rechazadas, René de la Torre Gil señaló que le pidieron cien mil pesos para que su hija lograra ingresar a la escuela de Medicina, aunque se negó a mencionar quién o quienes le pidieron el dinero.

“No voy a descansar hasta que me den una explicación, por qué mi hija fue rechazada de manera indebida. Muchos estudiantes, a pesar de que tuvieron un puntaje de más de mil, están fuera de la lista, ese es el reclamo y la única organización que se ha acercado a nosotros para darnos ese apoyo es MASAS”, declaró en entrevista.

Relató que reclamó al dirigente de la Federación Estudiantil Universitaria Guerrerense (FEUG), Carlos Gallegos Cortés, quien es alumno de la escuela de Medicina, que avaló con su firma un proceso de selección que tenía irregularidades.

“Nuestros hijos deben ocupar un espacio en la universidad de acuerdo a los resultados Ceneval. MASAS es la única agrupación que nos ha dado su apoyo y su solidaridad con nuestros hijos rechazados, donde ellos (las autoridades de la UAG) dice que los lugares fueron respetados, así lo refiere el rector, cuando no es así”, argumentó De la Torre Gil.

En las pancartas se podían leer los siguientes mensajes: “Pase automático a la UAG”, “Padres de familia de hijos rechazados no daremos un paso atrás”, “Derecho a la educación pública”, “Asesino, asesino de la educación, mataste la ilusión Arrizón”, “No más rechazados de la Universidad Enfermería”, y todos comenzaban con las siglas del MASAS.

El joven Jonathan García Samohano, quien dijo haber realizado en tres ocasiones el examen para ingresar a la escuela de medicina, indició que en éste último obtuvo mil 40 puntos y que en los años anteriores, obtuvo más de mil 30.

La jovencita de 19 años y egresada de la Preparatoria 27, con un promedio de 9.5, Fátima del Rosario de la Torre Soriano declaró que ella tuvo mil 78 puntos en la evaluación Ceneval; sin embargo tampoco fue admitida a la escuela de medicina.