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Por la ignorancia del Ayuntamiento, las fallas en el alumbrado, dice ex funcionario

Yee Trujillo

El ex gerente de la División Sureste de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y ex director de Alumbrado Público municipal, José Luis Muñoz Pintos, aseguró que por “la ignorancia” del Ayuntamiento las nuevas lámparas colocadas no cumplen con las normas oficiales mexicanas de seguridad, por lo que representan un peligro para automovilistas y peatones, “ni ahorran luz y apagan a Acapulco”.
“Las luminarias que se instalan son baratas, corrientes e ineficientes”, señaló el ex funcionario, y criticó que las pocas que funcionan en las principales avenidas sólo “chorrean” la luz dirigiéndola abajo de los postes porque no tienen una curva de iluminación adecuada para alumbrado público, de acuerdo con el tráfico de vehículos y peatones.
El especialista en Ingeniería Eléctrica y jubilado por la CFE, que colaboró en las administraciones de los ex alcaldes Zeferino Torreblanca Galindo y Félix Salgado Macedonio, detalló que estas nuevas lámparas fluorescentes de inducción magnética no cumplen con las normas del programa de eficiencia energética NOM-064-SCFI-2000 y la NOM-028-ENER-2010 ni el reglamento municipal de alumbrado público aprobado por Cabildo, además de tener un efecto estroboscópico que puede causar accidentes porque distorsionan la visión del movimiento.
“Es un peligro porque no dan la realidad de la velocidad en que se mueven por ejemplo los automóviles, y eso impide que el alumbrado fluorescente se utilice en fábricas donde hay máquinas en movimiento o en el alumbrado público”, especificó.
Sostuvo que “es mentira que se baja el consumo de luz” porque las lámparas anteriores de vapor de sodio utilizaban entre 70 y 250 watts, dependiendo si se encontraban en una colonia popular o la Costera, y las nuevas lámparas utilizan las mismas cantidades de energía.
Muñoz Pintos acusó que la empresa Óptima Energía engaña al gobierno municipal “por la ignorancia del propio Ayuntamiento que no tiene técnicamente elementos para juzgar las cosas”.
“Los sorprendieron dándoles un producto que no lo pueden meter en otro lado porque está prohibido”, dijo, y agregó que la falta de cumplimiento de las normas podría hacer que la CFE objete el alumbrado público.
“Este Ayuntamiento fue de saqueo, de destrucción de Acapulco y vea usted cómo está el agua, cómo están los baches, el alumbrado, lo que era un Ayuntamiento que se decía que iba a dejar un Acapulco de 10 y no llega ni a 5”, aseguró.
En relación a las declaraciones hechas el pasado 25 de julio por el director comercial de Óptima Energía, Daniel Gómez-Junco B, en las que el empresario culpó a la mala infraestructura del cableado eléctrico de la ciudad, Muñoz Pintos opinó que esto es “una gran mentira”, dudó que la empresa haya invertido 189 millones de pesos, e insistió en que este alumbrado no es aplicable para utilizarse en áreas exteriores.
Consideró estas lámparas nuevas fueron “un gasto inútil que no tenía por qué hacerse”, y que Óptima Energía “ofrece el engaño”, porque no ahorran energía y es “una empresa creada para sorprender”.
Muñoz Pintos insistió en que las 42 mil lámparas de vapor de sodio que se encuentran en la ciudad funcionan correctamente y tienen varios años más de vida útil, por lo que cuestionó el paradero de las 5 mil luminarias que han sido retiradas porque tienen un costo aproximado de 12 millones 500 mil pesos.
Explicó que durante la administración de Félix Salgado Macedonio el Derecho de Alumbrado Público (DAP) se disminuyó a una tercera parte y que con este ahorro, de unos 3 millones 600 mil pesos anuales, podrían haberse pagado el mantenimiento de las lámparas existentes o algún proyecto de ampliación del alumbrado público, y lamentó que “este dinero se desvió a otras cosas”.
“Se estaba recuperando la diferencia del consumo que se le pagaba a la Comisión Federal de Electricidad contra la recaudación del Derecho de Alumbrado Público, sobraban entre 300 mil y 400 mil pesos mensuales”, indicó.
Ante estas irregularidades, Muñoz Pintos recomendó que el gobierno municipal cancele este “convenio leonino”, y pidió que “los señores recojan sus lámparas y devuelvan las anteriores y que las pongan donde estaban”.

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