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Más de una hora esperan para ser atendidos en urgencias del hospital de Renacimiento

Karla Galarce Sosa

Usuarios del hospital Donato G. Alarcón deben esperar más de una hora para ser atendidos en el área de urgencias, pese a que la atención en esa área debe darse en menos de 15 minutos.
De acuerdo con los “indicadores de calidad” publicados en el nosocomio, el tiempo de espera de los usuarios se redujo de 68 a 62 minutos durante el primer cuatrimestre de este año, en comparación con el último cuatrimestre de 2011.
En una mampara cerca del área de gobierno del hospital de Ciudad Renacimiento se observó que el 88 por ciento de los pacientes atendidos en urgencias esperó más de 62 minutos de enero a abril de este año.
Otro aspecto evaluado entre los indicadores es el “trato digno del servicio de urgencias”, que incluye la satisfacción por la información proporcionada por el médico, que en el periodo evaluado este año disminuyó de 86 a 83 por ciento respecto al año pasado.
Sobre el trato digno recibido, la percepción del mismo aumentó del 56 al 57 por ciento, pero dichas cifras indican que más de una tercera parte de los usuarios no recibieron un trato digno durante la atención en urgencias.
En el panel fueron colocados cuadros estadísticos en los que se muestra el resultado de la aplicación de las encuestas a usuarios y médicos para medir la calidad de atención, de acuerdo con la vigilancia de María del Carmen Vidal López, a quien se muestra como “aval ciudadano” y cuyas funciones son las de realizar las encuestas, escuchar a los pacientes y sus familiares, así como difundir los derechos generales de los pacientes, solicitar y recibir información sobre proyectos de calidad y seguridad de los pacientes, así como participar en la Comisión Estatal de Calidad en Salud (CECAS) cuando se le requiera.
Otro indicador evaluado es la gran cantidad de cesáreas que se practican en el lugar y, aunque no se detalla cuál es la media nacional, se detalla que en el hospital Donato G. Alarcón se rebasa la media al practicar cesáreas al 38 por ciento de las mujeres, cifra que aumentó tres puntos con respecto al último cuatrimestre de 2011.
El director del hospital, Juan Carlos Hernández Luna, reconoció que el servicio está rebasado por el número de usuarios. “El personal está en períodos vacacionales pero estamos haciendo la cobertura”.
Consideró que la alta demanda en el servicio de urgencias se debe en gran medida a la ubicación del hospital y por la gran cantidad de acontecimientos de violencia que se han registrado en los últimos meses.
Durante una visita al lugar se pudo constatar que existe un retraso en la atención en el área de urgencias. Una mujer embarazada, quien se negó a proporcionar sus datos, explicó que había llegado al lugar desde el domingo en la noche, sin embargo la habían rechazado en dos ocasiones. La última vez fue ayer a las 8 de la mañana.
“El médico que me atendió me dijo que no iba a tener a mi hijo de parto normal, sino que iba a ser por cesárea porque tengo la cadera estrecha. Pero aquí ya me dijeron que me van a recibir dentro de dos horas y ya no aguanto”, dijo la mujer, quien estaba sentada en una jardinera y acompañada por su esposo.

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