Causa temor en Ometepec la llegada de policías estatales y federales y un helicóptero

Redacción

Un helicóptero con iniciales de la Policía Estatal sobrevoló ayer, después de las 12 del día y hasta las 5 de la tarde, la ciudad de Ometepec, lo que ocasionó que los ciudadanos comentaran entre sí de que “algo estaba pasando”.
Después, varias camionetas con policías federales entraron a la ciudad y recorrieron las principales calles, causando zozobra en los ometepequenses, quienes se preguntaban si alguien sabía sobre la presencia de los federales.
La última vez que se vio a los policías federales fue en la expoferia de Semana Santa, luego que ciudadanos externaron al gobernador la inseguridad que se está viviendo.
Poco antes de las 6 de la tarde una fila de camionetas con policías federales entraron en la calle principal de la ciudad: la avenida Cuauhtémoc; luego las camionetas se distribuyeron en las calles como si estuvieran buscando algo, lo que sorprendió a los transeúntes, quienes miraban a los policías federales que llevaban pasamontañas, “y ‘ora éstos, aquí ya se está poniendo como Acapulco”, dijo uno ante la presencia de los federales.
Los niños, asustados, preguntaban a los adultos que quiénes eran (los federales) y por qué no vestían (sin pasamontañas) como los policías municipales, “ya cállate, te van a escuchar”, dijo una madre a su hija que le insistía.
La reacción de los ciudadanos ante la presencia de los policías federales fue de miedo; pues la única vez que vieron encapuchados fue durante la caravana de los indígenas zapatistas de Chiapas, quienes recibían saludos por parte de los ometepequenses y habitantes de los pueblos circunvecinos, quienes hasta salían a las orillas de la carretera sólo para saludar a los miembros del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, quienes pedían un trato igualitario.
Algunos ciudadanos comentaban con temor que “seguramente” van a empezar los enfrentamientos en la ciudad y a cometer atropellos, como en muchas otras partes de la República mexicana, donde ha habido daños “colaterales”, con muertes de inocentes.
Otros más señalaban que la presencia de federales a lo mejor se debe a la visita de algún funcionario de primer nivel en la región de Costa Chica.