Refuerza la policía federal la vigilancia en Michoacán tras los enfrentamientos

Staff / Agencia Reforma

Apatzingán

Fuerzas federales reforzaron la vigilancia en la región de Apatzingán luego de un operativo de la Policía Federal que derivó el viernes en varios enfrentamientos y bloqueos que dejaron un saldo de nueve muertos; cinco sicarios y cuatro agentes.
En helicópteros artillados tipo Black Hawk las autoridades realizan sobrevuelos tanto en Apatzingán como en las localidades de Múgica, Parácuaro y Buenavista.
Además, el Ejército estableció un puesto de control para detectar explosivos, armas o personas sospechosas mediante el uso de equipos digitales de rastreo.
El llamado Puesto Militar de Seguridad Estratégico Móvil cuenta con equipo de detección no intrusivo, el cual opera a base de rayos gama que permiten detectar cargas sospechosas en todo tipo de vehículos.
“En cuestión de segundos podemos darnos cuenta si un vehículo trae alguna carga sospechosa y entonces procedemos a una revisión más exhaustiva”, explicó uno de los mandos castrenses a cargo.
Para la operación de este puesto de control el Ejército desplegó cinco tractocamiones con equipo táctico, armas y sistemas de cómputo.
La unidad móvil cuenta con señal de Internet, sistemas de comunicación y acceso a la base de datos Plataforma México.
También está equipada con una pequeña Enfermería, cama de recuperación, tablas rígidas para el traslado de heridos, área de exploración e instrumental quirúrgico.
En tres remolques se encuentran distribuidas las áreas de alojamiento para 150 elementos, abastecidas con cocina, comedor, sanitarios, regaderas y lavandería.
El puesto de vigilancia fue establecido sobre la Autopista Siglo 21, a la altura de la desviación a Apatzingán.
Fue en esta localidad donde el viernes un operativo de la Policía Federal desató varios enfrentamientos a balazos.
Entre los policías caídos se encuentra el inspector general regional Dante Valdez Montalbán, producto de una emboscada en el tramo carretero Apatzingán-Cuatro Caminos.
Las primeras investigaciones oficiales señalan que en este ataque los delincuentes emplearon fusiles de grueso calibre y granadas de fragmentación.
En el sitio las autoridades recolectaron más de 500 casquillos percutidos y tres granadas explosivas, dos aún con espoleta y otra que no detonó.
Reportes de corporaciones policiacas locales indican que también perdieron la vida los agentes Fabián Calderón Loredo y Martín Hernández Reséndiz, al parecer abatidos en la misma emboscada.
Y a las 11:00 horas de ayer se registró el fallecimiento de otro agente cuando recibía atención médica, de nombre Mateo León Hernández.
La SSP no había emitido ninguna versión sobre estas bajas, aunque sí reportó la noche del viernes el fallecimiento de cinco presuntos delincuentes durante los enfrentamientos.
El operativo federal incluyó el despliegue de agentes en comunidades como El Alcalde y Holanda, señaladas como zonas de influencia de la organización Los Caballeros Templarios, antes La Familia.
Además de las bajas registradas en ambos bandos, delincuentes bloquearon varios puntos carreteros utilizando y quemando vehículos particulares.
En esta región realizaron tres bloqueos, otro más en la Autopista Uruapan-Lázaro Cárdenas, uno en la Autopista México-Guadalajara, a la altura de la caseta de peaje Contepec, y otro en el Municipio de Zitácuaro.
En Múgica, un comando también rafagueó las instalaciones del Hospital General e incendió una patrulla de la Policía Federal y una camioneta particular.
Ayer, las huellas de la batalla aún podían apreciarse en algunos puntos de esta región.
Sin embargo, en medio de un ambiente tenso, la actividad comercial comenzó a volver a la normalidad.
La Terminal de Autobuses de Morelia también restableció sus corridas en todo el Estado tras una suspensión de casi 16 horas por los narcobloqueos del viernes.